El mundo de la literatura angloparlante esta de fiesta, esto debido al hallazgo de una investigadora de la Universidad de Oxford, quien mientras trabajaba encontró una rara copia manuscrita, alternativa, del Soneto 16 de William Shakespeare, escondida en una colección de poesía antigua.

Al parecer este raro, e inédito, manuscrito le perteneció temporalmente al fundador del Museo Ashmolean, Elias Ashmole, quien pese a no ser contemporáneo de “El Bardo” fue de los primeros aristócratas en revivir su trabajo póstumo a la muerte del dramaturgo.

De acuerdo con lo declarado por la investigadora que encontró el manuscrito, Leah Veronese, este forma parte de una compilación antigua de escritos renacentistas y del Siglo XVII, en el cual vienen trabajos de otros autores además de Shakespeare.

Veranose comento que tal vez esta versión del escrito paso como desapercibida debido a unos cuantos errores de pluma y el hecho de que el nombre del autor no venia en el papel. Pese a ello, estudios han confirmado que este escrito es legítimo.

Resaltó que esto es todo un hallazgo histórico, ya que Shakespeare aparentemente lo escribió para que sea recitada junto a ciertas piezas musicales. Si bien no se encontró alguna partitura, se cree que la rendición musical del poema, compuesta por Henry Lawnes, pudo nacer de esta versión.

Cabe señalar que el Soneto 116 es uno de los trabajos más políticos de William Shakespeare, siendo una sátira a la Guerra Civil Inglesa, así como a la monarquía. Esto es más notorio por el hecho de que esta versión fue escrita en una época donde tocar música para los plebeyos era un delito.  

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Foto: Wikipedia

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