Tras haber sido hospitalizado el pasado 15 de febrero, El Vaticano ha dado a conocer que el estado de salud del Papá Francisco empeoro, pero que ya se le está tratando tras descubrirse que sufre de una “infección polimicrobiana” que complicó su bronquitis, por lo que se le cambiará el tratamiento que estaba recibiendo y permanecerá más tiempo internado.

“Todas las pruebas realizadas hasta la fecha son indicativas de un cuadro clínico complejo que requerirá una hospitalización adecuada”, indico El Vaticano a través de un comunicado. Muchos doctores indican que esto se podría deber a situaciones o aflicciones que el sacerdote ha sufrido el el pasado.

Por ejemplo, durante su juventud el pontífice sufrió un caso muy grave de neumonía, de la cual solo se le pudo salvar tras extirparle una parte de un pulmón. Asimismo, en los últimos años ha sufrido caídas graves relacionadas al desgaste de sus articulaciones, por lo que desde el 2023 se le ha visto andar en silla de ruedas cada que sale al público.

Otros especialistas, ajenos al caso y que solo analizan su cuadro clínico basado en lo que se sabe públicamente, han comentado que también está dificultad puede tener algo que ver con la diverticulitis que el cura sufre desde previo a ser elegido para ser Papá. De hecho, en 2021 tuvo que someterse a una cirugía para la cual le quitaron parte de su colon debido a esta aflicción.

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Foto: Heraldo de Aragón

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