La Secretaría de Salud reportó un aumento considerable en los casos y defunciones por influenza durante el mes de enero, con un total de 3 mil 438 infecciones y 45 muertes debido a este virus respiratorio. 

Este repunte ha generado preocupación, ya que supera los números de diciembre, cuando se registraron 2 mil 31 casos y 12 defunciones, acumulando hasta la fecha 5 mil 469 casos y 57 muertes en lo que va de la temporada.

De acuerdo con el informe de vigilancia epidemiológica, las cifras de enero superaron las curvas de las últimas cinco temporadas de influenza, destacando un aumento notable de infecciones en comparación con años previos. Aunque los datos de las primeras semanas del mes muestran una tendencia al alza, las autoridades anticipan que la curva podría comenzar a descender en febrero, lo que ofrecería algo de alivio.

¿Dónde están ocurriendo los mayores repuntes?

Los estados más afectados por el virus en términos de defunciones son Sonora, Nuevo León, Puebla, Baja California e Hidalgo. En cuanto a los casos, los registros más altos se han reportado en Nuevo León, Ciudad de México, Puebla, Estado de México y Querétaro. La afectación se distribuye principalmente en tres grupos de edad: adultos mayores de 65 años, jóvenes entre los 20 y 34 años, y niños de 1 a 4 años, quienes han mostrado una mayor vulnerabilidad frente al virus.

La influenza: una enfermedad que no debe tomarse a la ligera

La influenza es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que afecta la nariz, la garganta y, en algunos casos, los pulmones. Aunque en muchos casos los síntomas son leves, el virus puede ser grave y, en ocasiones, fatal. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la mejor forma de prevenir la influenza es vacunándose cada año, una recomendación que sigue siendo clave para disminuir la propagación del virus.

Entre los síntomas comunes se encuentran fiebre, tos, dolor de garganta, congestión nasal, dolores musculares, dolor de cabeza y fatiga. Aunque la fiebre es frecuente, no todos los infectados la presentan. Además, algunos pacientes, especialmente los niños, pueden experimentar vómitos y diarrea, aunque estos síntomas son más raros en adultos.

Vacunación y medidas preventivas

La temporada de influenza, que arrancó en octubre del año pasado, ya está dejando una huella significativa en la salud pública del país. Con la llegada de los primeros fríos del año, las autoridades sanitarias refuerzan el llamado a la población a no bajar la guardia, especialmente con la vacuna como la medida más efectiva para evitar complicaciones graves. En este contexto, los sectores más vulnerables deben ser prioritarios, como los adultos mayores y niños pequeños, quienes enfrentan un mayor riesgo ante el virus.

Aunque las proyecciones indican que el repunte podría empezar a disminuir en febrero, no es momento de relajar las medidas preventivas. La influenza, aunque más común en esta época, sigue siendo una amenaza seria para la salud pública y requiere de una respuesta constante de los ciudadanos y las autoridades. Las campañas de vacunación continúan activas, y la colaboración de la población es crucial para mitigar los efectos de esta temporada de influenza.

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foto cortesía 

xmh