• Nación

Donald Trump y la promesa de una era dorada

  • Municipios Puebla
Hay motivos reales para estar preocupados porque el mensaje de Donald Trump es "una mezcla de aislacionismo, esferas de influencia e imperialismo"

México.- El presidente número 47 de Estados Unidos cambia de piel. Ya no es como el número 45, a pesar de ser la misma persona. Como bien lo señala Richard Haass, presidente emérito del Consejo de Relaciones Exteriores, el centro de pensamiento de mayor prestigio de Estados Unidos, hay motivos reales para estar preocupados porque el mensaje de Donald Trump es “una mezcla de aislacionismo, esferas de influencia e imperialismo”. Así, desde esa perspectiva, el nuevo inquilino de la Casa Blanca promete que “la edad dorada para América comienza a partir de ahora”.

La renovada presidencia de Trump y su marcado aislacionismo lo alejan aún más del idealismo internacional de un Woodrow Wilson, a quien el mundo debe en buena medida los cimientos del sistema internacional de naciones que hoy conocemos. Este nuevo aislacionismo también difiere del de su primera administración. Aunque mantiene posturas proteccionistas, especialmente en materia comercial, introduce elementos imperialistas y nacionalistas en su discurso que buscan satisfacer a su base electoral. Entre ellos, la idea de recuperar el canal de Panamá y renombrar el Golfo de México como Golfo de América, apelando al siempre socorrido “excepcionalismo estadunidense”.

El presidente entrante, de un plumazo, vuelve a deshacer lo que se había restaurado. Acaba de anunciar que Estados Unidos saldrá nuevamente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Acuerdo de París sobre cambio climático.

Las constantes alusiones religiosas, incluida la afirmación de que Dios lo salvó de un atentado para emprender la tarea de “hacer grande a Estados Unidos nuevamente”, encuentran eco en gran parte de la geografía estadunidense. Con este simbolismo religioso, Trump logra superar las divisiones entre republicanos y demócratas, con una narrativa que resuena profundamente en el imaginario colectivo del país.

La más reciente versión de Donald Trump no sólo trae consigo un renovado ánimo de venganza contra lo que él denomina el establishment de Washington D. C., sino que también ha cooptado de manera exitosa a los dueños del capital y buena parte de los principales medios de comunicación. Elon Musk, el hombre más rico del planeta, será el encargado de liderar la reforma del gobierno a través del recientemente creado Departamento de Eficiencia Gubernamental, lo que marca un giro radical hacia una gestión empresarial del poder público.

Al hacer énfasis en el supuesto despilfarro del gobierno anterior, Trump busca consolidar su imagen como el único capaz de devolver al pueblo la democracia. No obstante, estas palabras resultan huecas porque provienen de quien se negó a reconocer los resultados de las elecciones de 2020 y fue artífice intelectual de la crisis más aguda que han enfrentado las instituciones de su país.

Como era de esperarse, las primeras líneas de su discurso estuvieron dedicadas a la frontera con México, con su orden ejecutiva que la declara zona de emergencia. Como lo había adelantado hace unas semanas, las deportaciones masivas prometidas podrían iniciarse en cuestión de días en la ciudad de Chicago. En este sentido, se vislumbra un inminente choque de trenes entre el gobierno federal, encargado de la formulación de la política migratoria, y los gobiernos locales, especialmente las urbes llamadas santuario, como Chicago, las cuales ya han manifestado su intención de negarse a colaborar con el gobierno federal cuando se violen los derechos humanos de los más vulnerables.

La designación de los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas es otra de las medidas inmediatas que promete traer implicaciones profundas en la relación bilateral con México. Aunque las consecuencias concretas todavía están por verse, este movimiento representa una amenaza latente para la soberanía de nuestro país.

Una de las iniciativas que tendrá impacto dentro y fuera, es su intención de modificar la interpretación de la enmienda 14 de la Constitución, que otorga la ciudadanía a toda persona nacida en Estados Unidos, independientemente del estatus migratorio de sus padres.

Estados Unidos, fuera de la OMS y del Acuerdo de París sobre cambio climático.

El proteccionismo de Trump adquiere una dimensión desconocida con la creación del Servicio de Ingresos Externos, institución destinada a imponer aranceles a naciones como México, Canadá y China, considerados por Trump como amenazas económicas. Queda aún por ver si su promesa de imponer aranceles del 25 % a sus vecinos a partir del 1 de febrero es una ficha de negociación, pues al ser cuestionado al respecto, ligó la imposición de esas medidas a la negligencia de ambos países por detener los flujos de personas y de drogas como el fentanilo a su país.

No cabe duda de que las órdenes ejecutivas de Trump tendrán un alto impacto en las diversas regiones y bloques comerciales del mundo, pero en primera instancia en el propio bloque norteamericano con consecuencias inmediatas para los tres países que lo conforman.

A estas alturas nadie debería sorprenderse con la arenga política del presidente Trump. Sin embargo, el tiempo y las circunstancias generarán momentos propicios para estudiar, analizar y profundizar desde los diversos ángulos del conocimiento, los hechos históricos, contemporáneos y globales que han provocado las consecuencias de un segundo y estrepitoso mandato, el cual, además, contará con la mayoría del Congreso estadunidense.

Frente a este gran desafío, México deberá actuar con la serenidad, audacia e inteligencia coordinada de todos sus sectores y la firmeza de sus instituciones y organizaciones, como ya lo ha venido mostrando la presidencia de la República y la cancillería mexicana con el fortalecimiento de los programas de protección, de derechos civiles y humanos para las comunidades mexicanas a través de los consulados de México en ese país.

Resulta importante señalar que la cancillería ha expandido la alta diplomacia bilateral, regional y global que caracteriza la política exterior mexicana para generar así un mejor diálogo y coordinación entre los países con el imperativo de evitar visiones unilaterales que puedan afectar la seguridad y soberanías de las naciones de la región.

Al hablar de fortalecer la firmeza de las instituciones y promover los valores y principios que les rigen, es de destacar el papel de la UNAM frente a los desafíos que representan las políticas del segundo mandato del presidente Trump.

Desde hace varias décadas, y a partir de diversas áreas del conocimiento, la Universidad Nacional ha contribuido en la docencia, la investigación, la difusión de la cultura y la extensión a los estudios de la migración, los derechos humanos, el comercio, la economía, la sustentabilidad, las relaciones bilaterales, regionales y globales, entre muchos otros. De ahí la importancia de destacar dentro de la coyuntura actual la realización de acciones significativas que la institución ha llevado a cabo recientemente.

Una primera acción se refiere al Convenio firmado a finales de 2024 entre la Secretaría de Relaciones Exteriores y la UNAM para desarrollar acciones que, a través de eventos académicos, asesoría y sensibilización, apoyen a los connacionales en Estados Unidos; el desarrollo de proyectos de investigación en los temas de migración, sostenibilidad, derechos humanos y economía, entre otros, y la promoción y fortalecimiento de la educación continúa orientada a nuestras comunidades. En este sentido, habrá que enriquecer también los programas académicos a distancia de bachillerato y licenciaturas de la Universidad Nacional en ese país.

La segunda, la muy trascendente Conferencia Universitaria por la Defensa de los Derechos de las Personas Migrantes. En dicho encuentro académico convocado por el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí, participaron: Tamara Martínez, secretaria de Desarrollo Institucional; Lorena Rodríguez, directora de la Facultad de Economía; William Lee, coordinador de Relaciones y Asuntos Internacionales; Mario Luis Fuentes, vicepresidente del Patronato Universitario y responsable del Proyecto La UNAM en las Fronteras de México, y Alejandro Chanona, director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales.

En este encuentro, los académicos hicieron un examen profundo, claro y detallado de las medidas que serían anunciadas por la Casa Blanca. En sus presentaciones y desde el análisis económico, político, de los derechos humanos, globalización, seguridad y sostenibilidad, reafirmaron con contundencia analítica, el compromiso académico de la Universidad con la sociedad mexicana.

Destaca el mensaje del rector Lomelí al subrayar que “criminalizar la migración como una estrategia para desviar la atención de los grandes problemas de nuestro tiempo representa una regresión histórica y una amenaza para la convivencia pacífica entre personas de distinta procedencia” y el llamado que realizó a las instituciones de educación superior, a los organismos internacionales, a los gobiernos y a la sociedad civil para trabajar juntos en la construcción de sociedades que valoren la dignidad humana, la soberanía y la libertad por encima de ideologías e intereses.

¿Quieres mantenerte a tanto de todas las noticias hoy en Puebla? ¡Explora más en nuestro portal ahora mismo!

Foto Especial

mala

Tags: 

municipios_interiores: 

Encuesta

¿Usted ha recibido apoyos del gobierno del estado en el último mes?