Chilpancingo, Gro. - En una nueva manifestación que involucra a los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, un grupo de aproximadamente 40 normalistas secuestró al menos tres camiones de la línea Estrella de Oro en Chilpancingo, Guerrero.

La acción ocurrió alrededor del mediodía, cuando los estudiantes arribaron a la terminal de autobuses de la ciudad y obligaron a los pasajeros a descender de los vehículos para luego tomar control de ellos.

Según los reportes, los camiones fueron utilizados para trasladar a los estudiantes y otros manifestantes a la Ciudad de México, donde participarán en una marcha en protesta contra los recortes presupuestales a la educación, en especial a las normales rurales de Tlaxcala y Morelos, que están siendo afectadas por una disminución de recursos.

La protesta también tiene como objetivo exigir la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos en 2014, un caso que sigue siendo emblemático para el movimiento de Ayotzinapa.

Este acto de "secuestro" de camiones, que es recurrente en las movilizaciones de este tipo, es una forma en la que los normalistas aseguran el transporte para sus desplazamientos durante las marchas y protestas. En esta ocasión, los vehículos fueron utilizados para llevar a contingentes a la capital del país, donde la protesta se ha sumado a la agenda nacional de manifestaciones en defensa de la educación pública.

El secuestro de camiones también está relacionado con la reciente denuncia de los normalistas de Ayotzinapa, quienes el pasado 22 de noviembre realizaron un mitin en el Antimonumento a los 43 en Chilpancingo.

En este evento, los estudiantes expresaron su rechazo al recorte de raciones alimenticias para las normales rurales, que pasarían de 125 pesos a 100 por estudiante. Este ajuste en los recursos alimentarios es uno de los temas centrales que ha generado malestar dentro de la comunidad estudiantil.

La protesta cuenta con el apoyo de varias normales rurales que forman parte de la Federación de Estudiantes Socialistas Campesinos de México (FECSM), organización que ha sido clave en las movilizaciones de Ayotzinapa en Guerrero y en otros estados del país. Los normalistas buscan visibilizar las dificultades económicas que enfrentan estas instituciones educativas, a la vez que se oponen a cualquier intento de recorte que afecte su funcionamiento y condiciones de vida.

La toma de camiones y las movilizaciones por los recortes al presupuesto educativo reflejan la creciente tensión en las normales rurales de México, que históricamente han sido uno de los pilares de la educación pública en el país. El gobierno federal y los manifestantes se mantienen en una encrucijada, mientras los estudiantes continúan sus acciones en demanda de una mayor inversión en el sistema educativo.

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Foto cortesía

xmh