Este día regresará al penal de Cancún el empresario libanés, Jean Succar Kuri, condenado en 2013 a 100 años de prisión por los delitos de pornografía infantil y corrupción de menores en contra de al menos una decena de niños.

El pederasta confeso, está ligado al ex gobernador de Puebla, Mario Marín Torres, quien permanece privado de su libertad en el penal del Altiplano, en Almoloya, acusado del delito de tortura.

Ambas personas fueron acusados en su momento por la autora del libro Los Demonios del Edén, Lidia Cacho, quien describió en el texto referido cómo operaba una red de pederastas, en la que también estaba involucrado el textilero Kamel Nacif, a quien se le escuchó a través de un audio -que La Jornada hizo público- pedirle a Mario Marín, en ese momento gobernador de Puebla, detener a la también periodista.

La detención de concretó en Quintana Roo por parte de ministeriales de Puebla, quienes vía terrestre trasladaron a la periodista hasta Puebla, lapso de más de 20 horas, en la que Lidia Cacho denunció, fue torturada.

Tras las denuncias de la autoría de los Demonios del Edén, uno a uno de los personajes involucrados, han sido detenidos.

Fue el mes pasado, que el magistrado del Poder Judicial del estado, Carlos Lima Carvajal, revocó la orden que posibilitó el traslado desde enero de Succar Kuri a un penal de máxima seguridad, ubicado en Chiapas.

Según los videos que presentan medios nacionales como El Universal, se observa a Succar Kuri enfermo, con dificultad para caminar y acompañado se lo que pudiera ser una bolsa para diálisis.

Succar Kuri promovió un amparo en contra de su traslado a Chiapas, pero el 31 de enero un juez de Ejecución de primera Instancia del Distrito Judicial de Cancún calificó de legal la medida. Sin embargo, el magistrado adscrito a la Novena Sala Especializada en Material Penal Oral, Carlos Lima Carvajal, revocó la orden de traslado el 24 de agosto, al considerarla ilegal y ordenó el regreso de Succar Kuri al penal de Cancún, acción que fue condenada el pasado 28 de agosto por la organización Reinserta, quien recibió el respaldo de varias organizaciones en Cancún.

Foto Especial

clh