Puebla, Pue.- De enero al 4 de junio del presente año, se han registrado en el país un total de 117 mil 907 casos de picadura de alacrán, por lo que Puebla se ubica en la sexta posición a nivel nacional.

Lo anterior fue confirmado en las cifras del Sistema de Vigilancia Epidemiológica federal, sin embargo, el punto preocupante de estos casos -a mitad del 2023- es que dicha numeralia ya supera todos los casos presentados a lo largo del 2022 donde fueron 111 mil 659.

En el estado de Puebla existe un registro total de 5 mil 917 casos por picaduras de alacrán, de los cuales, 219 se presentaron los últimos días, es decir, del 28 de mayo al 4 de junio del 2023.

De ese universo, 2 mil 660 hombres han sido picados por un alacrán y 3 mil 257 a mujeres, pero aún no se supera el acumulado del 2022, que fue de 6 mil 24 pacientes en la entidad poblana.

El estado de Jalisco ocupa el primer lugar nacional en picaduras de este animalito con 22 mil 847 casos; le sigue Guanajuato, (con 22 mil 503); Michoacán, (con 11 mil 52); Morelos, (con 10 mil 191); el Estado de México, (con 5 mil 494).

A continuación en el sexto sitio aparece Puebla, con 5 mil 917 casos; Nayarit, (con 4 mil 329); Durango, (con 3 mil 108); Colima, (con 3 mil 091); y Sinaloa, (con 2 mil 875).

La Secretaría de Salud estatal dio a conocer que las picaduras de alacrán y escorpión son dolorosas, pero rara vez ponen en peligro la vida. Los niños pequeños y los adultos mayores tienen mayor riesgo de sufrir complicaciones graves.

De acuerdo a la Secretaría de Salud existen algunas demarcaciones donde existe la presencia de alacranes altamente tóxicos y son las siguientes: Huauchinango, Chignahuapan, Zacapoaxtla, El Seco, Huejotzingo, Puebla, Izúcar de Matamoros, Acatlán, Tepexi de Rodríguez y Tehuacán.

Los alacranes son animales de patas articuladas de la clase arácnida, del orden scorpionida y de la familia buthidae, con una distribución muy amplia en la naturaleza con más de mil especies conocidas; se les encuentra desde las costas hasta más de 2 mil metros sobre el nivel del mar; están dotados de una porción acumuladora de veneno en la parte distal del abdomen, en un ensanchamiento que llamamos aguijón, que les es útil para envenenar a sus futuras víctimas, que por supuesto incluyen al hombre.

Cuando al humano le inyectan veneno es generalmente accidental y pocas veces mortal, excepto a los menores de 5 años de edad. Se puede diagnosticar, se puede tratar y es prevenible su picadura. Los alacranes están distribuidos en todo el mundo, aunque prefieren los climas cálidos secos.

Foto Especial

mala