El diputado local Néstor Camarillo reconoció este sábado que se equivocó al callar los comentarios de mujeres víctimas de ataques con ácido, durante la sesión en la que se aprobó la tipificación de este delito como intento de feminicidio.

El pasado jueves, María Elena Ríos Ortiz estaba ofreciendo un comentario después de aprobada dicha Ley, y señaló que la diputada local del Partido del Trabajo (PT), Nora Escamilla Merino, quien preside la Comisión de Igualdad de Género, pidió al presidente de la Mesa Directiva del Congreso local que la callara.

A través de una carta publicada en redes sociales, el legislador priísta dijo que su actuar estuvo basado en reglamento interior del Congreso, “sin embargo, reconozco que me equivoqué. En ese día histórico para las mujeres, y particularmente paro quienes han sobrevivido a ataques de violencia ácida, su voz debió resonar en el espacio público por encima de estas disposiciones jurídicas que me obligaba a no permitir participación desde galerías, pues es una deuda histórica que como sociedad tenemos con ustedes”.

Ofreció una disculpa a María Elena Ríos y a Carmen Sánchez, a quienes reconoció que causó molestia por pedirles que permitieran continuar con el desarrollo de la sesión, “lamento el disgusto que les hice pasar; mis acciones nunca han sido, ni serán, con la intención de violentar su libertad de expresión y mucho menos revictimizarlas”.

El pasado 2 de marzo, en el Congreso del Estado de Puebla fueron aprobadas reformas a la Ley para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y al Código Penal del Estado para castigar de manera enérgica, con penas que van de los 26 a los 49 años a la violencia cometida contra las mujeres mediante el uso de sustancias químicas.

Foto: archivo m

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