La CIDH asegura que los jesuitas "han sufrido amenazas y agresiones por parte de grupos del crimen organizado, lo que les impide desarrollar normalmente las actividades pastorales".

 

En el interior de una iglesia en una comunidad indígena de Chihuahua, dos sacerdotes fueron asesinados en junio de 2022.

 

El gobierno de México asegura haber reforzado las medidas de seguridad en la región de Chihuahua, pero la CIDH estima que "no se estaría implementando un esquema de seguridad idóneo y efectivo para proteger" a los jesuitas.

 

Los 11 religiosos se hallan "en una situación de gravedad y urgencia como consecuencia de las amenazas y hostigamientos por parte de grupos del crimen organizado, lo que ha puesto en riesgo los derechos a la vida e integridad personal", apunta este órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

 

 

Desde diciembre de 2006, en México, han sido asesinadas más de 340.000 personas, sumiendo al país en una ola de violencia ligada al narcotráfico, según cifras oficiales.

 

Foto: Animal Político

LSM (afp)