El asesinato de la madre buscadora Esmeralda Gallardo, este 4 de octubre en la Ciudad de Puebla, es el cuarto caso registrado en lo que va de 2022 en México.

El crimen se suma al de Rosario Rodríguez, en el municipio Cruz de Elota, Sinaloa; Brenda Jazmín Beltrán Jaime, en Ciudad Obregón, Sonora; y Ana Luisa Garduño Juárez, en Temixco, Morelos.

Organizaciones de defensores de derechos humanos señalan que en los últimos 12 años han sido ultimados 16 familiares, padres o madres de personas desaparecidas.

Esmeralda Gallardo buscaba a su hija Betzabé Alvarado, desaparecida en 2021, y fue asesinada la mañana de este martes en la colonia Villa Frontera, en Puebla.

El crimen ocurrió minutos antes de las 5:00 horas, aparentemente cuando estaba esperando su transporte.

La mujer se encontraba en la calle 100 Poniente y 9 Norte, junto a la lateral de la autopista México-Puebla.

Hasta ese punto llegaron dos sujetos en una motocicleta, que de manera directa dispararon en varias ocasiones en su contra.

En Sinaloa, Sonora y Morelos, tres crímenes más

Rosario era madre de Fernando Abixahy Ramírez Rodríguez, desaparecido desde 2019. Luego de celebrar una misa en honor a su hijo, fue secuestrada por un comando armado el pasado 30 de agosto y unas horas después fue asesinada en el municipio de Elota, Sinaloa, entidad en la que participó en brigadas de búsqueda de desaparecidos durante el mes.

Brenda Jazmín, integrante del colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme, buscaba a su hermano desde 2018, y fue localizada muerta el 21 de julio en un motel de Ciudad Obregón, informó la Fiscalía de Sonora. De acuerdo a la autopsia, la causa de muerte de la mujer de 37 años fue por asfixia.

En tanto que la activista Ana Luisa Garduño Juárez fue asesinada con disparos de arma de fuego el 27 de enero en el municipio de Temixco, en Morelos. Ella era madre Ana Karen Huicochea, asesinada presuntamente por su novio el 12 de diciembre del 2012, y por quien pedía justicia.

Foto: especial

gse