Tras las protestas de vecinos de La Resurrección por la clausura de comercios, el alcalde Eduardo Rivera Pérez informó que la acción del ayuntamiento obedece a que en estos lugares se vendían autopartes robadas.

Luego de su habitual jornada mañanera, explicó que se hizo una revisión y se observó que eran negocios “disfrazados” de talleres mecánicos, donde se vendían dese llantas hasta espejos y asientos, entre otros artículos de dudosa procedencia.

El edil panista comentó que se supo de la operación irregular de estos negocios por denuncias ciudadanas.

“Hay varias denuncias ciudadanas de negocios en juntas auxiliares donde hay venta de autopartes robadas y el gobierno de la ciudad no se quedará con los brazos cruzados”, señaló al advertir que se quiere evitar un “efecto cucaracha” tras los operativos de la 46 Poniente.  

Del amago de los colonos para iniciar movilizaciones, refirió que la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom) estableció una mesa de diálogo con 20 personas inconformes, a quienes les dejarán en claro que los operativos y clausuras están apegados a la ley.

foto: especial

mca