Los recortes presupuestales y el alza en impuestos aplicados por el gobierno federal representan para el municipio de Puebla un monto de 300 millones de pesos, ante lo que la comuna hará un balance financiero para saber cómo cerrará sus finanzas este año.  

El alcalde Eduardo Rivera Pérez recalcó que es necesario tener claridad sobre la liquidez que posee el ayuntamiento de Puebla, ya que durante 2022 la capital dejó de recibir 90 millones de pesos del Fondo para el Fortalecimiento a la Seguridad (Fortaseg) y 150 millones por el Cobro de Alumbrado Público (DAP).

Debido a ello, comentó que la Tesorería Municipal y la Secretaría de Administración ya trabajan en el reporte que se dará a conocer en breve, para saber qué dinero ha sido gastado y lo que se tiene para cerrar el 2022.

La idea, dijo, se pueda destinar el recurso que se tiene a los proyectos prioritarios y en caso de ser posible ampliar algunas acciones,

Puso como ejemplo, el programa de las estancias infantiles, la pavimentación de calles, el bacheo y la seguridad pública, por ser de las demandas más sentidas de la población.  

Como en pasadas ocasiones, el edil capitalino lamentó que a Puebla “no le haya ido bien” al perder recursos del Fortaseg, el Impuesto Especial por Servicios (IEPS), así como por el cobro del Derecho de Alumbrado Público y afrontar un incremento en el pago de la energía por parte de Comisión Federal de Electricidad (CFE).

foto: especial

mca