El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, dedicó la misa por el descanso eterno de los 53 migrantes que fallecieron dentro de un remolque en San Antonio Texas, Estados Unidos.

Durante su homilía dominical, expresó sus condolencias para las familias de quienes perdieron a un ser querido y siguen en su búsqueda como consecuencia del fenómeno migratorio.

“Me uno al dolor de tantas familias que sufren la muerte de aquellos hermanos migrantes, muchos, la mayoría mexicanos que van en busca de oportunidades, que murieron en Texas”, soltó.

El líder de los católicos condenó que prevalece en la frontera con Estados Unidos, donde en su intento por buscar una mejor vida las personas encuentran más sufrimiento y hasta la muerte.

Desde que se conoció de la tragedia, la Arquidiócesis de Puebla externó su pesar por los migrantes y lamentó que las condiciones de pobreza y falta de oportunidades obliguen a miles de mexicanos caer en engaños de coyotes que ponen en riesgo su vida y su integridad al cruzar la frontera.

“Nos preocupa mucho que las condiciones de pobreza y falta de oportunidades obliguen a muchos hermanos nuestros a dejar su familia y su tierra para buscar mejores condiciones de vida. Nos vemos también en la necesidad de seguir ayudando y asesorando a todos los migrantes para que no caigan en manos de personas sin escrúpulos y con fines de trata de personas que se aprovechen de su necesidad”, resaltó en un comunicado hace un par de días.

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mca