El gobernador Miguel Barbosa Huerta señaló este miércoles que las terapias de conversión, que tienen como finalidad cambiar la orientación sexual de una persona o su identidad de género, son violatorias de derechos humanos.

El Congreso del Estado se apresta para reformar el Código Penal para sancionar las terapias de conversión, a lo que se han opuesto grupos que se presentan como “padres de familia” y piden que no se criminalicen.

“Para mi este tipo de terapias son violatorias de derechos humanos, es un asunto legislativo que tendrán que resolver ellos (los diputados)”, expuso en conferencia de prensa este miércoles.

Consideró muy legítimo que grupos de personas se pronuncien a favor o en contra de esta reforma legislativa.

Señaló que la inconformidad es un derecho de la sociedad, así como que las bancadas partidistas en el Congreso y los propios partidos políticos se pronuncien.

Sin embargo, remarcó que desde su opinión esas terapias forman parte de una posición “muy fuera de este tiempo y violatorias de derechos humanos”.

Los promotores de estas terapias afirman que pueden transformar a las personas gays, lesbianas o bisexuales en heterosexuales, y a las personas trans o de género diverso/diferente a cisgénero.

Sin embargo estos procedimientos implican abusos físicos, psicológicos y sexuales, así como la electrocución, la medicación forzada, el aislamiento, el confinamiento, las injurias y la humillación como ejemplos de métodos aplicados para tratar de obtener la conversión.

Foto: archivo m

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