Francia registró un nuevo récord de contagios diarios de COVID-19 con 271 mil 686, al tiempo que aumentaron también las hospitalizaciones y los ingresos en las unidades de cuidados intensivos.

El anterior máximo en una sola jornada se registró a finales de diciembre con 232 mil contagios.

La tasa de incidencia en siete días en Francia, calculada hasta el 31 de diciembre la última ofrecida oficialmente,  se situaba en 1 millón 824.5 casos por cada 100 mil habitantes.

Este martes había 20 mil 186 hospitalizados por COVID-19, lo que supone un incremento significativo respecto a los 19 mil 606 de la víspera. También hubo más ingresos en las ucis, con 3 mil 665 personas en total, 11 más que en lunes.

Los récords absolutos de 33 mil 500 hospitalizados a los que se llegó a mediados de noviembre de 2020 y de los más de 7 mil 100 enfermos en las unidades de cuidados intensivos que hubo a comienzos de abril de ese mismo año.

Se anunciaron 297 defunciones por coronavirus, después de las 270 del lunes. En una semana hasta el 31 de diciembre habían muerto mil 249 personas.

Esas estadísticas ponen en evidencia lo que ya se viene constatando en las últimas semanas: con ómicron, que ya es mayoritaria en Francia desde finales de diciembre, los contagios se han acelerado pero la gravedad de la enfermedad es menor que con variantes anteriores y la presión en los hospitales no sube al mismo ritmo.

Más de 53 millones de personas (78.6 por ciento de la población) han recibido al menos una inyección, y 51.8 millones (76.9 por ciento) tienen la pauta completa. Además, ya se han administrado más de 25.5 millones de dosis de refuerzo.

La actualidad en Francia sobre COVID-19 este martes estuvo marcada por el debate en la Asamblea Nacional sobre el proyecto de ley del Gobierno para que se pueda exigir un certificado de vacunación y no un certificado sanitario para múltiples actividades de la vida social como entrar en un bar o en un restaurante, ir al cine, a un espectáculo o a un estadio.

Ese debate, que inicialmente debía haber finalizado en la Asamblea el lunes, quedó suspendido por una votación sorpresa a medianoche organizada por parlamentarios de la oposición, que aprovecharon numerosas ausencias de diputados de la mayoría gubernamental a esas horas para bloquear el trámite.

fotografía: el diario

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