Puebla, Pue.- A pesar de la inversión que realizó el estado para reconvertir el Hospital General de la Zona Sur a fin de atender los casos de COVID-19, el inmueble luce descuidado. Desde plafones caídos, rastros de humedad y falta de limpieza, es lo que pueden observar los poblanos que acuden a atenderse a este nosocomio.

De acuerdo a una visita realizada por Municipios Puebla al inmueble, son varias las áreas que se encuentran sin mantenimiento. Prueba de ello es que la fuente principal que se encuentra en el acceso principal, la cual no funciona y el agua luce verdosa al estar estancada.

Las jardineras se encuentran descuidadas, el pasto crecido y los arboles sin podar.  Al igual, la fachada del inmueble presenta imperfecciones e incluso algunas grietas en los pisos de la parte superior.

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En cuanto al interior del hospital ubicado en la Unidad Habitacional de Agua Santa, la situación no es distinta, pues en varios pisos del edificio principal se pueden observar distintos desperfectos, como lo son la falta de plafones, grietas en los techos, pisos quebrados y rastros de humedad son evidentes en varios pisos.

Esto aunado a la falta de limpieza que existe en los sanitarios de donde se desprende un olor fétido por la acumulación de papel sanitario y falta de agua en algunos escusados.

Además, la falta de salas de espera para los familiares de los pacientes del área de hospitalización obliga que muchos de ellos tengan que dormir en el suelo para poder estar al pendiente de sus enfermos.       

El gobierno estatal invirtió 80 millones de pesos para la rehabilitación de las Unidades Medicas que fueron descuidadas durante las administraciones morenovallistas, no obstante, lo anterior no se aprecia dentro de este nosocomio, el cual es uno de los mas importantes de la capital poblana, por el alto número de beneficiarios, ya que aquí se encuentra el Hospital de La Mujer. 

Fotos: Carlos Cózatl

cdch