Debido a la contingencia sanitaria a causa de la pandemia por el coronavirus COVID-19, muchas empresas han optado por mantener cerradas sus oficinas y teniendo a sus trabajadores en sus casas, donde han podido desempeñar sus labores.

Esta situación, del trabajo en casa, ha hecho que se registre un incremento en el consumo de energía eléctrica y de internet, esto ha ocasionados que los costos también se hayan incrementado.

Es por ello que el gobierno está buscando regular esta situación, ¿qué significa esto? El llamado home office (trabajo en casa), se ha vuelto la mejor opción para no exponer la salud de los trabajadores a contagiarse de Covid-19, y por supuesto, ayuda a que el trabajo no se detenga y la economía siga avanzando.

En días recientes se ha hablado de la aprobación de una regulación del home office, la cual ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y el Senado, pero muchos aún siguen sin comprender los beneficios a los que serían acreedores los trabajadores que se desempeñen en esta modalidad.

En esto consistirá esta regulación:

1. Prevé que será voluntario y deberá estar regido por un contrato, donde se especifiquen las condiciones en que se ejercerá
2. Derecho de los empleados a la desconexión, para que su jornada se limite a la contratada con el patrón
3. Solo se podrán usar cámaras de video y micrófonos para supervisar el trabajo de manera extraordinaria y se prohíbe su geolocalización
4. Las empresas deberán aportar a sus trabajadores los medios, recursos y herramientas para realizar su trabajo a distancia (equipo de trabajo como computadoras, escritorios y sillas de oficina)
5. Pago proporcional de la electricidad y la instalación y mantenimiento de los equipos
6. En los contratos deberá definirse el horario de la jornada laboral y las horas que se destinarán para el consumo de alimentos

Ahora solo falte que esta regulación sea puesta en marcha.

Imagen de Pixabay

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