Puebla, Pue.- El gobernador Miguel Barbosa Huerta aclaró que el incidente de ayer contra la enfermera del IMSS de San José no fue un ataque directo por la pandemia de Covid-19, sino fue un asalto en el Barrio de San Antonio, mientras salía del templo con este mismo nombre, y  ya se detuvo al presunto responsable.

El jefe del Ejecutivo estatal explicó que el altercado que sufrió la trabajadora de la salud no fue una agresión directa o acto de discriminación por ser enfermera y atender a pacientes con coronavirus, sino que los presuntos delincuentes la despojaron de sus pertenencias.

“No fue un ataque, fue un asalto, un delito contra una enfermera, me siento solidario con su señor esposo de la enfermera, entiendo su exaltación, pero fue un asalto, están todos los elementos en la Fiscalía General, así como en la Secretaría de Seguridad Pública, se detuvo a uno de los asaltantes y recibirá el castigo de la ley, así que distingamos el caso perfectamente”, sostuvo.

En conferencia de prensa indicó que el esposo de la enfermera de exaltó y denunció que había sido una agresión contra la fémina, sin embargo, de acuerdo a las investigaciones arrojó que fue un presunto robo el que padeció ayer por la tarde.

Barbosa Huerta, indicó que le dará seguimiento al caso desde la Fiscalía General del Estado (FGE) para que se impute al presunto responsable, además de que se está reforzando la estrategia de seguridad fuera de los hospitales públicos y privados para evitar agresiones contra el personal de la salud.

Foto Ilustrativa

agb