Puebla, Pue.- En seis años, Puebla fue el tercer estado más beneficiado con el ramo 23, al captar 30 mil 375 millones de pesos del fondo federal, sin embargo, el gasto per cápita del fondo federal estuvo por debajo de la media nacional y el gasto no estuvo relacionado con la pobreza o la marginación de las comunidades.

La organización civil Mexicanos Contra la Corrupción presentó su estudio El Ramo General 23: Entre la Discrecionalidad y el Abuso, el cual presenta un diagnóstico del uso discrecional del Ramo 23, que fue creado para cubrir obligaciones extrapresupuestarias o contingencias.

La asignación de este presupuesto incluye previsiones salariales, como prestaciones de ahorro para servidores públicos, recursos destinados a cubrir eventuales incrementos en las percepciones de servidores públicos, creaciones de plazas o aportaciones de seguridad social, y contingencias como las provocadas por desastres naturales.

Como señala una revisión publicada por el medio Datamos, de 2013 al año 2015, los gobiernos poblanos recibieron los mayores recursos de este Ramo: 3 mil 722 millones de pesos en 2013, 5 mil 137 para 2014 y 7 mil 31 millones en 2015; posteriormente, la entrega del recurso federal empezó a descender a 6 mil 488 millones para 2016 y 3 mil 422 para 2017, hasta aumentar en 2018 con 4 mil 575 millones de pesos.

Por arriba de Puebla, se encuentran la Ciudad de México y el Estado de México como los estados con mayor monto presupuestal del ramo 23. En el caso de la CDMX, los recursos que recibió presentaron un incrementó sistemático hasta alcanzar un monto equivalente al recibido por el Estado de México en 2018.

El Estado de México concentra 12 por ciento del total de recursos entregado a los estados. Cuatro entidades (Ciudad de México, Puebla, Chiapas y Guerrero) acumularon -cada una- alrededor de 5 por ciento del total de la bolsa repartida. Tlaxcala fue la entidad con menos recursos con apenas 1 por ciento.

En el ojo de la ASF, manejo del Ramo 23 de Puebla

En la auditoría a la cuenta pública 2017 al gobierno de Puebla que encabezó Antonio Gali Fayad, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) arrojó observaciones por mil 244 millones de pesos sobre su ejercicio del gasto federalizado, específicamente del Ramo 23, el cual señala, la asignación no corresponde al gasto.

A nivel nacional, la ASF identificó irregularidades por 7 mil 422.7 millones de pesos, de los cuales en Puebla se señalaron 920.6 millones de pesos, específicamente del Fortafin, donde Puebla fue el cuarto estado a nivel nacional con mayor monto señalado.

Ni por población, ni por situación de pobreza

Al intentar justiciar la entrega de recursos por tamaño de población, la organización Mexicanos contra la Corrupción encontró que no existía tal relación, ya que Colima resultó la ser la entidad con mayor gasto per cápita: 34 mil 449 pesos, mientras que el Estado de México sumó 4 mil 260 pesos.

Si bien Puebla es la tercer entidad con mayores recursos del Ramo 23, fue la 15 en cuanto al subsidio per cápita, por debajo del promedio nacional de 6 mil 282 pesos.

La organización también encontró que mientras mayor marginación reporte un municipio o tenga una mayor proporción de personas en situación de pobreza, menos recursos recibe del ramo 23.

Para detener la discrecionalidad de los recursos, la organización propone fortalecer el sistema de contrapesos políticos en el proceso presupuestario, modificar el marco legal del proceso presupuestario para volver obligatoria la aprobación de la Cámara de Diputados a las adecuaciones presupuestarias a partir de cierto monto, y que el fondo para atender contingencias esté regulado con parámetros de rendición de cuentas.

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