Miles de personas circulan en bicicleta, en vehículos o a pie, por los caminos que atraviesan el territorio poblano y que llevan a la Basílica de la Virgen de Guadalupe, ubicada en Ciudad de México.

Son tres las principales rutas que utilizan los peregrinos para llegar al cerro del Tepeyac: la carretera federal México-Puebla, la autopista que conecta a ambas ciudades, y Paso de Cortés.

Este 12 de diciembre, cuando los católicos celebren a la Virgen de Guadalupe, la Basílica recibirá al menos a 7.2 millones de personas, la cifra oficial de fieles que llegaron a ese sitio esa misma fecha pero en 2017.

Las peregrinaciones son comunes sobre la autopista México-Puebla, lo que no disminuye el peligro para los fieles que la recorren a pie junto a miles de automóviles.

Muchas personas acuden al Seminario Palafoxiano de Puebla para pasar el día con la Virgen de Guadalupe.

Familias y amigos se acompañan durante su caminata por Paso de Cortés, en las faldas del volcán Popocatépetl.

Así se ve desde el cielo uno de los campamentos de peregrinos en la zona del volcán Popocatépetl.

La Virgen de Guadalupe es llevada en las espaldas de algunos católicos, como parte de alguna manda o promesa que le hicieron.

En muchas ocasiones los peregrinos se preparan con meses de anticipación, para cumplir con las promesas que hicieron a “la morenita”.

Fotos: agenciaenfoque

GJ