Investigadores de la Universidad de Washington y de la Escuela Informática de la Universidad Carnegie Mellon realizaron un experimento realmente revolucionario, en el que lograron establecer la conexión directa entre tres cerebros humanos.

De tal manera que pudieron intercambiar información sin necesidad de utilizar palabras o símbolos.

La tecnología se llama BrainNet, y combina la Electroencefalografía (EEG) para registrar las señales cerebrales y la Estimulación Magnética Transcraneal (TMS) para transmitir información de forma no invasiva a otros cerebros.

Por medio de la EEG, el sistema registra los impulsos electrónicos indicativos de la actividad cerebral y a través de la Estimulación Magnética Transcraneal, las neuronas son estimuladas con la ayuda de campos magnéticos.

Los creadores anunciaron que los resultados en Arxiv, se encuentran en un archivo online para la prepublicación de artículos científicos, la interfaz abre las posibilidades de crear futuras interfaces cerebro-cerebro, que garantizarán la búsqueda colectiva de soluciones para cualquier tarea mediante una ‘red social’ de cerebros conectados.

La interfaz se desarrolló mediante un sistema de puzles parecidos al juego conocido como Tetris.

Sin embargo, había un grado de dificultad, pues la persona que tomaba la decisión no veía la parte inferior de la pantalla, mientras que los otros dos participantes sí podían ver la pantalla completa.

La transmisión de señales resultó ser muy lenta, los científicos estuvieron muy contentos con el experimento que se realizó con cinco grupos diferentes de personas y alcanzó una precisión del 82.15%, lo que estos investigadores consideraron un resultado alentador, tratándose de un primer ensayo.

Los científicos pretenden perfeccionar esta tecnología y alcanzar mejores resultados para desarrollar la tecnología EMT, y garantizar una conexión relativamente estable y clara sin penetrar en el cráneo.

Imagen pixabay

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