Oriental, Pue.– En el año 2014, Leopoldo Barrón tomó protesta como presidente municipal para un periodo de cuatro años con 8 meses, sin embargo su notable ausencia y la falta de gobernabilidad ha sumido a los habitantes de Oriental en una constante inseguridad que los tiene cansados por los robos, asaltos y secuestros.

Los vecinos de esta región manifestaron que el alcalde no cumplió con sus compromisos y obligaciones, usando recursos públicos para favorecer a su familia y a él mismo, inclusive en las pasadas elecciones desvió recursos al candidato de la coalición “Por Puebla al Frente”, Guillermo Pozos. Los habitantes manifiestan que desde hace casi 2 años el presidente ya no radica en este municipio y solo despacha de vez en cuando en su oficina.

En repetidas ocasiones, debido a la falta de obras, así como múltiples anomalías y la falta de seguridad, se han manifestado cerrando la presidencia municipal de Oriental. Aseguran que el alcalde está coludido o protege a bandas delictivas de la región, quienes son los mismos policías quienes agarran al ladrón y al poco rato lo dejan en libertad, sin acusarlo de nada.

De igual forma vecinos indican que el alcalde en cuatro años no hizo nada importante en este municipio, solo algunas obras en colonias y juntas auxiliares, pero nada fuera de lo normal que ayude al crecimiento de la economía y desarrollo de este municipio que se encuentra cerca de la zona de Audi.

Ingobernabilidad y falta de seguridad

La intranquilidad que vive el municipio de Oriental desde hace unos años a la fecha ha sido el lastre que viven todos los días los habitantes de este municipio, encumbrado en la parte centro este del estado de Puebla.

La principal problemática que han enfrentado los pobladores de Oriental y juntas auxiliares, es la presencia de bandas delictivas que no son de la región y que pertenecen a Tlaxcala y el Estado de México. En algunos lugares piden ya derecho de piso a los comerciantes. De igual forma los secuestros y levantones han sido el pan de cada día, por eso muchos han preferido salir del municipio e instalarse en otros lugares.

Inclusive a unos pasos de la presidencia municipal y la comandancia se han registrado estos delitos, como el pasado diciembre de 2017, cuando robaron y destruyeron los cajeros automáticos que estaban instalados.

De igual manera, sobre la carretera federal San José Chiapa- Oriental y Oriental-Libres, así como los caminos a las comunidades, los transportistas son el “blanco” de los asaltantes que comercializan los productos en mercados de la zona o en los estados vecinos.

Justicia por la propia mano

Vecinos de Oriental, hartos de la inseguridad que los aqueja, en más de dos ocasiones, han detenido e intentado linchar a ladrones. El primer caso se presentó el pasado 23 de enero del año en curso cuando un masculino, recibió una brutal golpiza después de que fue capturado en la colonia Patrimonio. Pese a que la gente estaba enardecida ante el hartazgo de la ola de delincuencia, el individuo fue entregado a las autoridades y hospitalizado por las diversas lesiones que tenía.

Posteriormente el pasado 25 de mayo, cuando tres personas fueron linchadas en Miravalles, comunidad perteneciente a este municipio, luego de que presuntamente asaltaran un negocio del poblado e intentaran darse a la fuga. Los hechos se registraron después de las 17:00 horas, luego de que los tres hombres ingresaron a un establecimiento comercial atendido por una mujer de la tercera edad, a quien golpearon para obligarla a entregarles el dinero.

Una turba de 100 personas logró detener a los tres presuntos ladrones, a quienes amarraron de manos, golpearon y condujeron hasta el centro de la comunidad en donde después de varios minutos les prendieron fuego.

Ilustración: municipiospuebla

GJ