Puebla, Pue.- Afectados por la cancelación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, DACA, el Tecnológico de Monterrey se solidariza con la comunidad de jóvenes nacidos en México que residen en Estados Unidos, medida que afecta de una manera injusta a cerca de 800 mil jóvenes inmigrantes indocumentados −los llamados Dreamers− que, a través de una orden ejecutiva expedida en 2012, han subsanado durante los últimos cinco años la ausencia de legislación al respecto.

Salvador Alva, presidente de la institución, destacó: “En el Tecnológico de Monterrey estamos comprometidos con la creación de oportunidades en México para que nuestra juventud no tenga que emigrar en busca de una mejor vida. Destacamos a nivel mundial en el desarrollo de liderazgo emprendedor y el impacto de nuestros egresados es palpable en todo el país. Recientemente abrimos las puertas de nuestros amplios programas de ayuda financiera −que apoyan a más del 50% de nuestro alumnado− a los miles de jóvenes deportados o que en forma voluntaria han regresado al país en los últimos ocho años, facilitando los trámites de acreditación de estudios”.

En 2016, en conjunto con la US-México Foundation, el TEC inició una red de colaboración entre México y Estados Unidos compuesta por Dreamers y alumnos del programa “Líderes del Mañana”, que considera tutoría mutua, a la vez que contribuye a su empoderamiento y desarrollo personal y profesional.

El TEC reforzó estas medidas con un programa de reclutamiento en los Estados Unidos para los jóvenes registrados en DACA, que además de lo anterior, incluirá la posibilidad de acceso al programa Líderes del Mañana, en el cual se otorgan becas del 100%. La alianza que la institución mantiene con las mejores universidades norteamericanas y su amplia red de ex alumnos en Estados Unidos serán una plataforma eficaz para crear este vínculo.

En el Tecnológico de Monterrey reconoce que el talento no tiene fronteras y que en el mundo los muros físicos, políticos e ideológicos no deben tener ya cabida. Las puertas de la institución siempre estarán abiertas para recibir a jóvenes de excelencia académica, con potencial de liderazgo y sensibilidad social, independientemente de su origen y condición socioeconómica. En lugar de construir muros, seguirá generando puentes de solidaridad para impulsar el progreso de la juventud mexicana en nuestro país y más allá de nuestras fronteras.