Todo comenzó cuando personal con chamarras y chalecos de Comercio Exterior y de la Secretaría de Finanzas del gobierno del estado, pretendía realizar un operativo para exigir a los dueños de los negocios las facturas que ampararan la procedencia de su mercancía.

Los comerciantes se quejaron de que la acción era arbitraria porque los funcionarios no se identificaron, además de que comenzaron a decomisar ropa.

“Fue un saqueo vil, no daban tiempo ni de hablar cuando ya se querían llevar la mercancía y la autoridad municipal ni sus luces, nadie que nos defendiera, luego dicen que trabajan, pero la verdad es que el presidente (Marcos Flores Morales) ni se apareció, como siempre no hace nada por la gente”, afirmó uno de los afectados.

Fue entonces que los vendedores salieron a las calles a expresar su molestia y voltearon un carro blanco tipo sedán, donde –aseguraron- viajaban los servidores públicos, para después prenderle fuego, así como a una camioneta donde, afirman, llevaban la mercancía que habían recogido.

En total fueron dañados tres automóviles y una camioneta, incluso frente al palacio municipal de Zacatlán.

Edil no estaba

Entrevistado vía telefónica, el alcalde Marcos Flores Morales reconoció que no se encontraba en el municipio cuando ocurrieron los hechos.

“Vengo saliendo de Puebla, justamente fui a checar este asunto”, argumentó con voz titubeante al tiempo de indicar que no tenía conocimiento de que un operativo de este tipo se iba a realizar.

Asimismo, indicó que “hay otros medios para que los comerciantes hagan valer sus derechos”, y agregó que gracias a la intervención de la Policía Municipal no hubo pérdidas humanas.

Al cierre de esta nota se reportaba gente reunida en el centro de Zacatlán, además de saqueos a una tienda Coppel.