Cuetzalan, Pue.- Ante el embate de la delincuencia que rebasó a las autoridades y recluta a muchos jóvenes, vecinos del Barrio Nauiogpan en Cuetzalan marcharon este 5 de Mayo por las calles de la cabecera para exigir al presidente Óscar Paula Cruz que cumpla con su obligación de garantizar la vigencia del Estado de Derecho y la seguridad ciudadana.

Quienes han violado la ley y asechan a la población, precisaron, pasaron de cometer asaltos a secuestrar y asesinar, y el uso de las armas de fuego se volvió común, lo que provoca que la inseguridad se apodere de la vida de las comunidades, por lo que consideraron que los ilícitos que se registran tienen que ver con el accionar de grupos de la delincuencia organizada.

Los habitantes anunciaron que están dispuestos a luchar, de manera pacífica contra los delincuentes para impedir “que se apoderen de los jóvenes” y convertirlos en malhechores y que actúen en contra su propio pueblo, por ello hombres, mujeres, jóvenes y niños, se declararon como “vecinos vigilantes”.

Pero además reclamaron del gobierno municipal que ponga en funcionamiento una caseta de vigilancia en San Miguel Tzinacapan; que la policía acuda de inmediato a atender las alarmas vecinales; que haya patrullaje en las calles, carreteras y caminos, poniendo énfasis en los lugares de “mayor inseguridad y riesgo”. Además de que realice una reunión con los habitantes del barrio Nauiogpan, donde informe qué medidas tomará para atender estas demandas.

La realización de la manifestación este 5 de Mayo, fecha en la que se conmemora la batalla en la que los indígenas serranos vencieron al invasor extranjero, tuvo el objetivo también de retomar el “ejemplo de nuestros antepasados y tomar el valor que hoy necesitamos para enfrentar una lucha más delicada y dolorosa: hoy estamos enfrentando al crimen organizado que está penetrando en nuestros pueblos, reclutando a nuestros jóvenes y usándolos como carne de cañón en la operación de sus asaltos”, señalaron.

“No hay invasión más dolorosa que el arrebato de nuestros jóvenes para convertirlos en delincuentes que actúen contra su propio pueblo. Por ello hacemos esta marcha hoy, para emprender esta lucha por nuestras familias, por nuestro pueblo”, añadieron en un documento que firmaron centenares de manifestantes y entregaron a los regidores del ayuntamiento debido a que el alcalde no se encontraba en la cabecera.

Aclararon, sin embargo, que esta lucha será pacífica, sin violencia. “No queremos violencia, no nos mueve el rencor. Nos mueve el anhelo de vivir en paz”.

Antes de la concentración se realizó una misa en la capilla del Barrio de Nauiogpan, además de que en algún momento se colocaron 6 lonas para advertir a los delincuentes que la gente está unida contra ellos.