Izúcar de Matamoros, Pue.- La crisis de la industria azucarera en la zona del ingenio de Atencingo no sólo ha afectado a los más de 9 mil productores, también afecta la vida económica de los 11 municipio en donde se cultiva este endulzante. 

Silvestre Ríos Gutierrez, presidente del comité de locatario de Chietla, mencionó que al carecer de dinero los campesinos, productores y cortadores, entre otros, no circula el dinero en tiendas, abarrotes, papelerías, merenderos y un sin fin de locales del mercado.

"Al no pagar a los campesinos nos afecta a todos y les pedimos de la manera más atenta al presidente de la República al gobernador del estado, y diputados, senadores, para que esto se solucione que no les paguen lo que perdieron, el campo es la base para toda fuente de trabajo".

En días pasados los líderes de los sindicatos de productores rurales solicitaron al gobierno del estado un fideicomiso para poder ayudarse y entregar las liquidaciones a los campesinos, sin embargo esta resolución apenas está en la mesa.

En entrevista, Gabriel Conrrado González Cortez, presidente del sindicato de la Confederación Nacional Campesina (CNC) del ingenio de Atencingo, señaló que se ha alcanzado una pérdida en la tonelada de la caña de azúcar de un 40 por ciento, y continúa a la baja.

"Haciendo cuentas, estamos perdiendo un 43.44 por ciento, esto equivale a 600 millones de pesos que dejaron de circular en la región y está afectando a la gente. Nosotros como cañeros siempre hemos sido suficientes pero esta vez sí necesitamos del apoyo del gobierno".

Comerciantes aseguran que sus ventas han bajado en más del 50 por ciento, a pesar de que ya deberían de mejorar las condiciones por que se acerca el regreso a clases.

"Con esta situación sí nos afecta mucho, han bajado más de un 50 por ciento, es muy difícil para todo el comercio, hay gastos que se tienen que cubrir dentro del mercado, las ventas están muy bajas, nos está afectando demasiado", mencionó Viridiana Méndez Acevedo, comerciante de Atencingo.

Uno de los factores más importantes que afectaron este sector y que ahora no es auto sustentable, radica en la entrada al país de endulzantes como la fructosa proveniente de otros países.
Y aunque se había hecho esto desde hace años, en estos dos últimos años se ha incrementado dejando a un lado el azúcar nacional. Los endulcorantes están acaparando mercados que eran del azúcar, como la industria refresquera.

"Pudimos como representantes haber hecho un llamado al gobierno de Felipe Calderón Hinojosa para que no importara azúcar de otros países, en su momento no se hizo, en la zafra pasada hubo precios más o menos buenos (...) la caída ya es del 40 por ciento y amenaza con seguir cayendo porque el ciclo productivo termina hasta el 30 de septiembre", mencionó en entrevista Miguel Ángel Sosa Guzmán, líder del sindicato de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR).

Con este panorama es complicado que la economía de los comerciantes mejore, y temen que siga empeorando. "Más que nada los padres de familia ahorita, igual, necesitan un poco de ‘lana’ para apoyar a sus hijos que van a entrar a la escuela. Al no haber suficiente dinero en la región, nos afecta esto que les está pasando a los cañeros, no hay recurso, nos siguen aumentando la gasolina. Hay que pagar impuestos, control vehicular y de dónde vamos a sacar ese dinero".

La economía generada por los campesinos de caña de azúcar es mayor a la que actualmente generan las remesas, sin embargo esta zafra 2012-2013 se convirtió en la peor crisis económica de los últimos 20 años, aseguró Sosa Guzmán.

Actualmente con esta problemática, un productor de caña obtendrá de ganancia mil pesos para vivir al mes, es decir, que de las 15 mil hectáreas de caña de azúcar que se cultivan para el ingenio de Atencingo, le corresponden apenas 1.7 hectáreas, de las cuales obtiene al año 50 mil pesos, pero con la crisis solo obtuvo un pago de 25 mil pesos, pero descontando insumos, impuestos y trabajadores se queda con la mitad, 12 mil pesos para todo un año.