- Puebla
La Fiscalía se lava las manos en el caso de Judith Abigail
Puebla, Pue.- La fiscalía fracasó en el caso de Judith Abigail, primero porque no le prestaron la debida atención a la desaparición de la mujer de 28 años; tampoco prestaron atención a José Eduardo, quien fue el último en verla con vida y ahora ya no lo encuentran.
A base de la "información por debajo del agua", la Fiscalía General del Estado (FGE), pretende "lavarse las manos", en el caso de la muerte de Judith Abigail Jiménez Pulido, presuntamente levantada la tarde del jueves 8 de agosto por tres sujetos y quien la tarde del viernes 16, fue hallada sin vida, en estado de descomposición en un terreno cercano al relleno sanitario, en una de las laterales de la carretera que va a Santa Cruz Alpuyeca.
En la entrega pasada le comenté que la FGE había fracasado en el caso de Abigail, primero porque no le prestaron la debida atención a la desaparición de la mujer de 28 años de edad y después porque tampoco prestaron atención a José Eduardo, de quien sólo se sabe es gallero y fue el último en ver con vida a Abigail y ahora ya no lo encuentran.
Y resulta que por "debajo del agua", se filtró la información de que a Abigail la habían asesinado de un balazo en el rostro, además de que el crimen se perpetró el mismo día que la levantaron, en otras palabras, que aunque hubieran intervenido de inmediato en su búsqueda, lo que debieron de hacer por obligación, ya la hubieran hallado sin vida.
Con ese reporte pretenden lavarse las manos de la negligencia en la investigación del caso.
Lo que no aclararon es porque se les perdió José Eduardo, el último que vio con vida a Abigail y quien les dijo que ese viernes 8 de agosto, cuando iba con la joven madre de dos niños, a bordo de una camioneta de su propiedad, que ella conducía, sobre la carretera a Tecali de Herrera, en el kilómetro 13, se les cerró un vehículo que los impacto.
Del automóvil bajaron tres sujetos que intentaron llevárselos, pero a él lo dejaron porque vieron que "se quedó atorado con el cinturón de seguridad" y entonces se llevaron a Abigail.
Con esa simple y poco creíble historia la FGE, se abstuvo de investigar la coartada del único testigo y cuando quisieron buscarlo ya se les había ido, cerró sus cuentas sociales y se desapareció del mapa.
La FGE no puede tapar el sol con un dedo, sí hubo negligencia y apatía en las investigaciones, porque tuvieron a la mano al que sabe qué le pasó realmente a la joven mujer y lo dejaron ir, lo que debe de ser investigado a fondo y no valerse de los medios de comunicación para ocultar sus errores.
Ahora sólo les falta convocar a una conferencia de prensa para el recalentado de su trabajo en un mes.
Nos vemos cuando nos veamos
Columna Porque los muertos corren rápido de Intolerancia
Foto: Archivoe
cdch