Puebla, Pue.- El de septiembre fue el mes de la instalación de la mesa directiva de la LX legislatura, con una mayoría de legisladores nunca antes vista al Congreso del Estado de Puebla.  

Y es que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), no solo ganó los principales municipios de la entidad, también logró el control del Poder Legislativo con sus aliados de los partidos del Trabajo y Encuentro Social.

Todo lo anterior mientras Puebla seguía sumida en la violencia del crimen organizado, principalmente de las bandas dedicadas al robo de combustible.

Violencia contra autoridades

La noche del 3 de septiembre, el presidente municipal electo de Nopalucan, Félix Aguilar Caballero, fue asesinado en la junta auxiliar de Santa María Ixtiyucan.

Personas armadas lo siguieron hasta concretar el crimen a balazos. 

Al día siguiente Genaro Apolonio, hermano del ex edil de Palmar de Bravo, Facundo Tomás Casimiro Abundio, fue encontrado asesinado en terrenos de cultivo cercanos a la carretera Nopalucan-Acatzingo. 

Siete días después, el regidor de Obras Públicas de San Sebastián Tlacotepec de Porfirio Díaz, Victorino Merino León, murió tras recibir varios impactos de bala, por parte de sujetos desconocidos.

El 16 de septiembre, una aparente balacera entre policías y civiles después de la ceremonia del Grito de Independencia, dejó una persona muerta y cuatro heridas en el municipio de Juan N. Méndez.

Los hechos ocasionaron la ira de la gente que quemó las casas del alcalde y del edil electo. 

Alcaldes que desaparecen

Desde el 29 de agosto, cuando dos presuntos ladrones fueron linchados en Acatlán de Osorio, el alcalde Guillermo Martínez Rodríguez no volvió a presentarse al palacio municipal.

La población tampoco supo más de los regidores que de la noche a la mañana dejaron de acudir a sus oficinas.

El 4 de septiembre, Rafael Núñez Ramírez pidió licencia definitiva al cabildo para no regresar al cargo de alcalde de San Martín Texmelucan.

El petista se alejó del cargo luego de que la Policía Municipal fue intervenida por el gobierno del estado, debido a las diversas irregularidades con las que funcionaba, además de la violencia que azotaba a la demarcación. 

La nueva legislatura y el desaire de Gali

El 15 de septiembre rindió protesta la mesa directiva de la LX legislatura que, por primera ocasión, no tenía entre sus principales actores a priistas o panistas.

Al evento no asistió el gobernador Antonio Gali Fayad, a pesar de que inicialmente confirmó su presencia.

La mayoría morenista aprovechó el acto para insistir en la existencia de un fraude electoral a favor de la panista Martha Erika Alonso Hidalgo.

A las pocas horas el presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que se reuniría con los gobernadores del país, menos con el de Puebla por la impugnación de los comicios.

Inseguridad acaba con la fiesta

En una docena de municipios de suspendieron las celebraciones del Grito de Independencia o el Desfile del 16 de Septiembre por cuestiones de inseguridad o de carácter político, confirmó la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Las demarcaciones afectadas fueron Acatlán de Osorio, Chichiquila, Huehuetlán El Grande, Santa Clara Ocoyucan y Tehuitzingo, Aljojuca, Chietla, Chinchotla, Tlacotepec, Tepanco y San Salvador El Verde, además de San Mateo Tlaixpan.

La banda del comandante

El comandante de la Policía Municipal de Acatzingo, Vicente Ponce Rojas, fue detenido a principios del mes de septiembre en el Arco de Seguridad de Palmar de Bravo.

Al poco tiempo se supo que estaba al frente de una banda de secuestradores y asaltantes a transportistas, además de que también se dedicaba al robo de combustible en la región.

Junto con él fueron aseguradas otras cuatro personas, entre ellas una mujer.

Ilustración: municipiospuebla

GJ/CLH