Puebla, Pue.- Desde las primeras horas de este martes primero de julio, cientos de devotos se han congregado en el Templo de Santa Mónica, para rendir homenaje al Señor de las Maravillas en su día.

De esta manera, poblanos y de otras localidades acuden a dicha celebración llena de fe y tradición que se realiza cada primero de julio.

Es así que fieles acuden al Templo de Santa Mónica, donde acuden para cantarle las mañanitas, agradecer favores recibidos y pedir milagros. La tradición reúne a creyentes que expresan su devoción con ofrendas, flores y oraciones.

Además de agradecer milagros, las personas hacen peticiones o simplemente celebrar su devoción.

Simplemente el ambiente es festivo, hay mariachis, flores y antojitos, rodean la iglesia en honor a una de las imágenes más veneradas del estado.

También hay fieles que acuden con ofrendas de café, pan y comida para agradecer los milagros recibidos y renovar su fe.

Dato curioso: su túnica original es la más donada y robada en la historia local.

El Señor de las Maravillas es una talla del Siglo XVII ubicada en el Templo de Santa Mónica, anexo al Museo de Arte Religioso de Santa Mónica, en Puebla.

Aunque la gente celebra la fiesta principal del Señor de las Maravillas el primer día de julio, también lo hace en el tercer viernes de cuaresma con mucha alegría.

En ambas ocasiones los devotos participan en diversos eventos que se realizan tanto fuera como dentro del templo de Santa Mónica, el cual no cuenta con un atrio, de tal suerte que, como las dos entradas al templo dan a la calle, en esos días se tienen que cerrar ambas calles al tránsito vehicular para convertirlas en espacios públicos que la gente puede utilizar en una especie de proceso de apropiación.

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