Este viernes, los principales destinos turísticos de Guerrero arrancaron el fin de semana con una ocupación hotelera moderada, con cifras que reflejan una recuperación aún lenta tras temporadas complicadas para el sector.

En Acapulco, con cerca de 15 mil habitaciones disponibles en hoteles abiertos, la ocupación promedio fue del 46.2%, mostrando una actividad desigual entre sus distintas zonas. La región de Acapulco Diamante reportó un nivel de ocupación del 44.1%, mientras que la Zona Dorada alcanzó casi la mitad de sus cuartos ocupados, con un 48.7%. Por su parte, la Zona Tradicional presentó la tasa más baja, con solo un 41.7% de habitaciones llenas.

En la Costa Grande, el binomio turístico Ixtapa-Zihuatanejo mostró contrastes. Ixtapa comenzó el fin de semana con una ocupación cercana al 65.8%, cifra que supera la mitad de sus cuartos disponibles, pero en el pueblo mágico de Zihuatanejo, la ocupación fue notablemente menor, con apenas un 28.5%.

Otro destino emblemático, el pueblo mágico de Taxco de Alarcón, registró una ocupación hotelera aún más baja, situándose en solo el 20.8%.

En conjunto, los destinos turísticos de la región conocida como Hogar del Sol alcanzaron una ocupación promedio del 50.2%, reflejando que la actividad turística mantiene un ritmo modesto en comparación con años previos.

Respecto a los tiempos compartidos, en Acapulco se registró una ocupación del 32.8%, mientras que en Ixtapa-Zihuatanejo la cifra fue un poco más alta, con un 34.7%.

El panorama general muestra que aunque la actividad turística en Guerrero se mantiene activa, aún está lejos de los niveles que suelen marcar la temporada alta. Las condiciones económicas, además de factores externos como la competencia de otros destinos y la percepción de seguridad, influyen en el comportamiento de los visitantes.

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xmh