Este sábado 26 de abril, en el puerto de Progreso, Yucatán, se dio inicio a la obra de adaptación del Tren Maya para convertirse en una vía de transporte de carga, un proyecto que busca impulsar la logística del sureste del país y mejorar la competitividad económica de la región. La presidenta Claudia Sheinbaum, acompañada de autoridades locales y federales, encabezó el evento donde se dio el banderazo de salida para este nuevo tramo del Tren.

El proyecto de transporte de carga no solo busca facilitar el traslado de productos entre Progreso y Coatzacoalcos, sino también beneficiar a sectores clave como el comercio y la industria local, ofreciendo una alternativa rápida y económica para el transporte de mercancías. Según las autoridades, se proyecta que esta infraestructura facilitará el movimiento de materiales como alimentos, materiales de construcción y combustibles a lo largo de la península de Yucatán.

Nuevas vías para una región en crecimiento

El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) estima que el Tren Maya de carga abarcará aproximadamente 700 kilómetros, extendiendo su impacto más allá del transporte turístico que inició a operar en diciembre de 2023. Esta ampliación de la red ferroviaria, que conecta puntos estratégicos en el sureste, tiene como objetivo mejorar la eficiencia del comercio en una región con gran potencial, pero también marcada por retos logísticos debido a su ubicación geográfica.

Se espera que este sistema de carga, cuya puesta en marcha está prevista para 2026, sea un pilar en la modernización de la infraestructura de la región, permitiendo no solo el movimiento de productos de manera más ágil, sino también generando una mayor competitividad frente a otros corredores industriales del país.

Impacto laboral y económico

Uno de los puntos clave del proyecto es su impacto económico. El gobierno federal asegura que el sistema ferroviario de carga generará más de 10 mil empleos directos e indirectos en las regiones involucradas. Además, se estima que los costos logísticos se reducirán hasta en un 30%, lo que podría representar un aliciente para las empresas locales y extranjeras que buscan alternativas más económicas para transportar sus productos.

En términos laborales, se proyecta que las zonas donde se instalarán nuevas vías y centros de distribución se verán beneficiadas no solo por la creación de empleos directos, sino también por el dinamismo que generará la actividad económica en general.

Reacciones locales

Por su parte, el gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, subrayó la importancia de la ampliación del Puerto Progreso, que se complementa con esta nueva infraestructura ferroviaria. En sus declaraciones, destacó que las obras de modernización del puerto de altura, que cuentan con una inversión de más de 12 mil millones de pesos, son fundamentales para fortalecer la economía regional.

"Este proyecto es clave para transformar el futuro económico de Yucatán, creando una infraestructura logística de clase mundial", indicó el mandatario.

¿Qué sigue para el Tren Maya de carga?

Aunque el inicio de las obras marca un avance en el proyecto, el Tren Maya de carga aún debe atravesar una serie de etapas para su completa ejecución. Esto incluye la construcción de nuevas estaciones de carga, vías adicionales y centros de distribución en puntos clave, lo que permitirá que, al entrar en funcionamiento en 2026, este nuevo sistema de transporte de mercancías complemente al servicio turístico que ya está en marcha.

A pesar de que el proyecto tiene un gran potencial para transformar la infraestructura de la región sur del país, la comunidad local continúa vigilante para garantizar que la obra se desarrolle bajo estrictos criterios ambientales, como lo ha indicado la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).

No te pierdas ninguna actualización importante. Explora nuestro portal para seguir informado sobre las últimas noticias en Puebla.

foto cortesía 

xmh