Cuautlancingo, Pue.- Catorce días después del asalto de un comando armado a un palenque ubicado a media calle de la Presidencia Municipal de Cuautlancingo de donde secuestró a veinte personas, el presidente municipal, Félix Casiano Tlahque, hizo una referencia pública de los hechos. 

Se trató de un acto cívico en la escuela primaria Miguel Hidalgo de Chautenco, captado en video y subido a la cuenta oficial del DIF Municipal, donde el edil habla a los padres de familia sobre la responsabilidad de educar a los hijos y de esa forma contribuir con el Estado Mexicano para inhibir la violencia. 

“Debido a esas acciones y acciones que ustedes perfectamente conocen que sucedieron días pasados en nuestra comunidad, hemos decidido desde el ayuntamiento de Cuautlancingo la emisión de una convocatoria donde el objetivo es reclutar a ciudadanos interesados en ser policías certificados”, les dijo.

En una primera etapa la comuna pretende la contratación de 25 uniformados que complementen las filas municipales.

Casiano Tlahque añadió que se instalarán 12 cámaras de videovigilancia adicionales a las 12 con las que ya cuenta el municipio que serán ubicadas: dos en San Lorenzo Almecatla, tres en Sanctorum, tres en Chautenco y cuatro en la cabecera municipal.

El blindaje de seguridad se complementará con cuatro patrullas para aumentar los rondines; en total, se trata de una inversión de tres millones de pesos, según estimó el edil.

En el mensaje que dio a los paterfamilias sostuvo que el nivel de violencia que actualmente se vive en el país es resultado de las acciones que se dejaron de hacer en casa, por lo cual les pidió no abandonar su obligación de educar a los hijos para evitar que el problema social siga en aumento.

Por la mañana de este martes circuló una presunta invitación desde la Dirección de Comunicación Social, firmada por el director Rodolfo Tlaque, en donde se convocaba a una conferencia de prensa en el Complejo de Seguridad Pública. El documento anunciaba que el munícipe daría una opinión en torno al secuestro en el palenque ocurrido el 1 de marzo.

Sin embargo, el funcionario negó haber convocado y alegó que la firma que aparece en el documento no correspondía a la suya, ni el membretado al oficial de su oficina.