- Puebla
El Grande, de su captura en Puebla, al juicio contra García Luna en NY
El 12 de septiembre de 2010, la Secretaría de Marina Armada de México montó un fuerte operativo en el fraccionamiento de lujo “Puerta de Hierro”, ubicado al norte de la ciudad de Puebla.
En el parque del complejo residencial aterrizó un helicóptero de la milicia mientras un reducido grupo de marinos cateó un domicilio y capturó a Sergio Enrique Villarreal Barragán, alias “El Grande”.
Tras ello se supo que era lugarteniente de “Los Beltrán Leyva” y vivía en Puebla junto con dos cómplices más.
Arturo Beltrán ya conocía Puebla. Informes de seguridad señalaron que el 10 de diciembre de 2009 fue ubicado en la Angelópolis y se desató una balacera en la junta auxiliar de La Libertad, donde fueron detenidos cinco presuntos sicarios, aunque el capo escapó a Morelos, donde días después fue abatido.
Durante la detención de El Grande en Puebla, la Marina halló en la casa que ocupaba cuatro vehículos, tres de ellos blindados; tres armas largas con dos cargadores cada una; dos granadas ofensivas de fragmentación, tipo militar y 45 mil 520 pesos mexicanos y mil 570 dólares.
Se indicó que no existió resistencia por parte de las tres personas aseguradas.
Villarreal Barragán también era apodado como el “Comeniños” y/o “King Kong”, nació en 1969 y es originario de Torreón, Coahuila.
En mayo de 2012 fue extraditado a Estados Unidos, donde permanece desde ese año.
Reaparece en juicio de García Luna
Este lunes, El Grande testificó en el juicio por narcotráfico contra el exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna.
El capo aseguró que fue testigo de que en varias ocasiones el exfuncionario recibió sobornos de parte del cártel de Sinaloa, por lo que así pudo aumentar la importación de cocaína a México y enfrentar a grupos rivales.
Incluso señaló que era un funcionario federal que formaba parte de las actividades de la organización, ya que daba información sobre operativos de seguridad e investigaciones en su contra.
En su intervención, señaló que cuando él comenzó a trabajar para el clan de los Leyva, en el año 2001, García Luna ya estaba en la nómina del cártel y se le siguió pagando hasta la muerte de Arturo Beltrán Leyva en 2009.
Foto: especial
gse