“No vamos a ceder ni un solo paso” fueron las palabras del alcalde Eduardo Rivera Pérez, en torno a la acción del ayuntamiento de Puebla para evitar que ambulantes se instalaran en el zócalo de la ciudad con el uso de la fuerza pública.

Luego del enfrentamiento entre vendedores y la policía municipal, el panista recalcó que está abierto a dialogar con las agrupaciones para lograr el reordenamiento del Centro Histórico, pero no permitirá que se quieran “adueñar” del espacio público y tampoco caerá en provocaciones de los líderes.  

Más aún, dio a conocer que luego de la gresca de este jueves, la comuna interpuso las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General del Estado (FGE).

“Quiero ser muy claro y muy enfático, no vamos a ceder ni un solo paso en este proceso de reordenamiento del Centro Histórico (…) No vamos a permitir que ambulantes se vuelvan a adueñar de estos espacios que son de los poblanos”, enfatizó respecto a que comerciantes vendan sobre la calle 5 de mayo, el zócalo, Reforma y El Parían.

En esa tónica, el munícipe reprochó que a pesar de que el ayuntamiento, a través de la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom), ha ofrecido varias alternativas a los ambulantes, como es el caso de la bolsa de trabajo o su reubicación a calles periféricas del centro, simplemente no aceptan ninguna.

Ante ello, sostuvo que quizá esto se deba a que hay organizaciones que se convirtieron en mafias. “No quiero generalizar, pero sí quiero ser muy puntual en que este problema que recibimos es uno de los más graves”, citó.

Esta no es la primera vez que Rivera Pérez señala que en el centro de Puebla se cometen delitos como el narcomenudeo y la trata de personas que se encubren de actividades comerciales.

La mañana de este viernes luego de evento matutino declaró en entrevista con medios de comunicación que respeta el derecho que tienen los ambulantes para trabajar, pero envío el mensaje de que nadie está por encima de la ley, por lo que su gobierno actuará para preservar el orden.

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