100 días

El concepto de los primeros 100 días de gobierno se originó durante la presidencia de Franklin D. Roosevelt en Estados Unidos, en 1933, en el contexto de la Gran Depresión. Este mandatario popularizó la expresión en un discurso radial el 25 de julio de aquel año, estableciendo un modelo para evaluar el desempeño inicial de quien lidera una nación.

Aunque no tiene un fundamento jurídico ni está contemplado en alguna normativa global que obligue a rendir cuentas en dicho periodo, este concepto ha sido adoptado como un referente para medir el impacto y la dirección de los gobiernos recién iniciados.

Hoy, los 100 días adquieren un nuevo significado con la presidenta Claudia Sheinbaum, quien durante ese periodo ha demostrado su compromiso de dar continuidad a la transformación de la vida de México, para lograr la paz duradera y la prosperidad compartida.

Al ser la primera mujer en asumir la Presidencia de la República, no sólo rompió un techo de cristal centenario, sino que también ha demostrado un liderazgo basado en principios y resultados, reafirmando los valores de la Cuarta Transformación.

Desde que recibió el Bastón de Mando en el Zócalo, dejó claro su compromiso con el pueblo: “No les voy a fallar. Seguiremos haciendo historia”, y en este lapso gobernó bajo los valores del Humanismo Mexicano, colocando a las personas en situación de pobreza en el centro de las decisiones, lo que le ha valido alcanzar una aprobación histórica del 78 por ciento.

Este fin de semana, al dirigirse al pueblo en el mismo espacio emblemático, durante el informe con motivo de los primeros 100 días de su administración, la mandataria fue enfática al expresar que México está cambiando para bien, que es tiempo de transformación, tiempo de mujeres y que nadie ni nada está por encima de la Constitución.

Hizo un recuento de los logros y acciones con los que ha dado continuidad al legado de transformación que inició el expresidente Andrés Manuel López Obrador. Uno de los más importantes es haber convertido los Programas para el Bienestar en derechos constitucionales, como la pensión para mujeres de 63 y 64 años y la creación de la Beca Rita Cetina.

En el ámbito económico, con la reforma aprobada, Pemex y la CFE recuperaron su estatus de empresas públicas, asegurando el control nacional de los recursos estratégicos del país. Además, el incremento al salario mínimo y la creación del programa Alimentación para el Bienestar reflejan su compromiso con quienes más lo necesitan.

La presidenta presentó 18 iniciativas de ley al Congreso. Entre las más destacadas se encuentra la reforma al Poder Judicial, que busca combatir la corrupción. Otros decretos importantes incluyen la creación de la Universidad Rosario Castellanos y el fortalecimiento de programas de vivienda y protección animal.

Por otra parte, la creación de secretarías como la de las Mujeres, y la de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, al igual que la Agencia de Transformación Digital, muestra una visión que apuesta por la igualdad sustantiva y el desarrollo sostenible.

En el tema de seguridad y construcción de la paz, los primeros resultados son alentadores. La reducción del 16.3 por ciento en los homicidios dolosos durante este primer trimestre refleja que la Estrategia Nacional de Seguridad está dando frutos.

La jefa del Ejecutivo federal volvió a dejar en claro que este es un gobierno para todas y todos, pero especialmente para las personas históricamente relegadas. “No llegué sola, llegamos todas”, enfatizó nuevamente, para luego subrayar que “la paz y la prosperidad se construyen ampliando los derechos del pueblo”.

En 100 días, la presidenta ha demostrado que la voluntad política, así como el compromiso con el pueblo y con la justicia seguirán siendo los principios que guían a la Cuarta Transformación en esta segunda etapa. El camino por delante no será sencillo, pero las acciones iniciales del gobierno muestran que hay rumbo, claridad y determinación.

Una muestra de lo anterior fue la postura firme de defensa de nuestra soberanía respecto a la política y la relación internacional con Estados Unidos, de cara al regreso de Donald Trump. Ante ello, la presidenta refrendó que México es un país libre, soberano e independiente, y que habrá respeto, coordinación y colaboración, pero jamás subordinación.

Estamos hablando, pues, de los primeros 100 días de un proyecto de nación que refleja los anhelos de justicia y bienestar del pueblo mexicano. Ahora, con el apoyo popular que la respalda, la mandataria tiene la posibilidad de marcar un antes y un después en la historia de México, y de llevarlo a la grandeza que todas y todos merecen.

 

ricardomonreala@yahoo.com.mx

X y Facebook: @RicardoMonrealA

 

clh

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Ricardo Monreal

El doctor en Derecho, Ricardo Monreal Ávila, nació el 19 de septiembre de 1960 en Plateros, Zacatecas, en el seno de una familia de catorce hijos.

Estudió Derecho en la Universidad Autónoma de Zacatecas y luego cursó estudios de maestría y doctorado en Derecho Constitucional y Administrativo en la Universidad Nacional Autónoma de México.

En 1975 comienza su trayectoria política militando en las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), allí ocupó varios cargos: fue coordinador nacional de la Defensa Jurídica del Voto en la Secretaría de elecciones de la dirigencia nacional; presidió el Comité Directivo Estatal de Zacatecas y, posteriormente, fue secretario de Acción Política de la Confederación Nacional Campesina. En éste periodo de militancia participó en el Congreso de la Unión, fue diputado federal dos veces (1988-1991 y 1997-1998) y llegó al puesto de senador (1991-1997).

En 1998, Monreal Ávila abandona al PRI para unirse a las filas del PRD y contender, ese mismo año, a la gobernación del estado de Zacatecas.

Fue diputado federal en tres periodos: de 1988 a 1991 y de 1997 a 1998 por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), y entre 2012 y 2015 por Movimiento Ciudadano y por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

Cumplió labores como senador en dos periodos, de 1991 a 1997 y de 2006 a 2012 por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el  Partido del Trabajo (PT).

Ahora por tercera ocasión es Senador de la República y coordinador de la fracción parlamentaria de Morena.