Ciudad de México.– El pleno del Congreso capitalino aprobó la reforma a la Constitución local y a la Ley de Salud que establece la prohibición de la venta, producción, distribución y comercialización de cigarrillos electrónicos y vapeadores.

El dictamen, presentado por las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas y de Salud, adiciona un numeral 8 al inciso D “Derecho a la Salud” del artículo 9 “Ciudad Solidaria”, así como un segundo párrafo al numeral 3 del apartado B “Derecho al Trabajo” del artículo 10 “Ciudad Productiva”. También se incorporó un cuarto párrafo al artículo 2 de la Ley de Salud de la Ciudad de México, en el que se establece que serán sancionadas todas las actividades relacionadas con cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos similares, además de la producción, distribución y enajenación de sustancias tóxicas, precursores químicos, el uso ilícito del fentanilo y otras drogas sintéticas no autorizadas.

Durante la discusión, la diputada de Morena, Valeria Cruz Flores, advirtió sobre los efectos de estos dispositivos: “Lo que no se dice de los cigarrillos electrónicos es que sí contienen tabaco, que sí generan adicción y que no es vapor lo que se inhala, sino micropartículas altamente dañinas para la salud”.

En contraste, la legisladora de Movimiento Ciudadano, Patricia Urriza Arellano, consideró que la medida es “un despropósito” y argumentó que en lugar de prohibirlos debieron regularse para garantizar estándares de calidad. Señaló además que el mercado de vapeadores podría representar hasta siete mil millones de pesos anuales en impuestos.

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djs