Esta semana se vivió un momento único durante una misa en la Isla de Capri al sur de Italia, pues cuando los asistentes menos lo esperaban, el tenor italiano Andrea Bocelli apareció de forma instantánea e interpretó el Ave María de Schubert, generando una profunda emoción entre los fieles y el sacerdote.

Vestido informalmente, con bermudas, playera azul y gafas oscuras, Bocelli ofreció su talento sin previo aviso, convirtiendo una misa ordinaria en una experiencia extraordinaria.

Varios asistentes capturaron el momento y de inmediato lo compartieron en redes sociales.

En la plataforma X, las reacciones no tardaron en multiplicarse: “Siempre me hace llorar”, “Asombroso” y “Esta canción calienta mi corazón”, fueron algunos de los comentarios que reflejan la admiración del público.

Muchos usuarios han destacado este momento como “un regalo musical”.

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Foto Redes sociales

LMR