A dos meses de que el pastor cristiano William “Bill” Schonemann, de 76 años, fue encontrado sin vida en su casa, con las manos clavadas a una cruz dibujada en la pared y con una corona de espinas en su cabeza en New River, Arizona, autoridades de esta zona dieron a conocer que ya se dio con el presunto responsable.

Curiosamente el hombre en cuestión fue arrestado un mes después del asesinato, por cargos completamente diferentes tras ser vinculado con una serie de robos reportados en Sedona. Por el momento la Fiscalia del Condado de Maricopa esta contemplando una revisión de los cargos por los cuales se le imputo.

Si bien muchas veces este tipo de delitos son averiguados por la propia policía, este en realidad fue confesado por el propio asesino, quien incluso pidió ser entrevistado por una cadena televisiva mientras yace en prisión. En esta, el hombre reveló que esto formo parte de su plan “Operación Primer Mandamiento”.

El individuo en cuestión, identificado como Adam Christopher Sheafe, explicó que esta consistía en recorrer Las Vegas, Portland, Seattle, Detroit, Nueva York, Charlotte, Mobile, Beaumont y El Paso, con el objetivo de asesinar a 14 líderes religiosos en 10 estados, para “limpiar” al mundo del cristianismo.

Durante esta misma entrevista, al ser cuestionado por sus acciones y si se arrepentía, el hombre aseguró que no era así. Entre risas insistió en que no se arrepiente de nada, y que su rol como parte del “plan sionista” es terminar con la vida de todos aquellos sacerdotes, pastores o curas, que predican la palabra de Jesucristo.

Argumentó que la doctrina cristiana es un invento de la humanidad que San Pablo creo para mantener al pueblo judío bajo yugo romano. Cabe señalar que este hombre se autodenomina asimismo como un “etnosupremacista israelí”, portando tatuajes de símbolos sionistas y slogans anti-palestinos en hebreo.

“Cristiano, católico, mormón… cualquiera que predique que Jesús es Dios está equivocado. Dios, el Padre, solo él es Dios”, resaltó en la entrevista, puntualizando constantemente que pese a su amor por la ideología sionista sus motivos no eran étnicos, sino puramente basados en un supuesto supremacismo religioso.  

Minutos antes de concluir la entrevista, Sheafe aseguró que su detención se dio cerca de la Capilla de la Santa Cruz en Sedona, Arizona, debido a que planeaba asesinar a dos sacerdotes que vivían por ahí. Aseguro que el automóvil al cual se le señalo por “robar” le pertenecía a uno de estos religiosos.  

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Foto: Especial // Redes Sociales

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