Lo que es más, a la primer mandataria le sirve que en el sistema político haya aún esos consejeros semi independientes, que tratan de pasar desapercibidos ante los mares infestados de voraces obradoristas, ya que así el régimen puede simular que existe aún un sistema electoral “autónomo”…

Pero mismo esa utilidad para el segundo piso de la transformación tiene sus límites. “Libres”, pero no tan libres los queremos.

La excusa vino: a Sheinbaum y al ex presidente les molestó con creces el que NO TODOS los consejeros electorales avalaran la farsa llamada ‘elección judicial’… He dicho que esto ya había sido cantado por López Obrador. Era obvio, una vez obtenido el poder, no lo soltaría jamás.

Como cualquier institución, el INE es perfectible, pero la reforma electoral que vendrá de Palacio Nacional lo anulará. Apláudanle su servilismo a Guadalupe Taddei, la hoy presidenta del otrora autónomo organismo; este tampoco ayudará a salvar al INE. ¡Ingenuos quienes pensaron que ella no era actor de la 4t o quienes pedían darle el beneficio de la duda!

El telón de la farsa democrática ha caído. El controlar al INE no dará un ápice de margen de maniobra para que la oposición (cuando despierte, esto es) pueda competir de manera equitativa. Volvemos al control gubernamental de las elecciones.

Por si no fuese suficiente, el INE se ha quedado sin dinero y con la próxima reforma electoral tendrá aún menos. Aquí surge un segundo pretexto: el INE gasta mucho. Gastó 8 mil millones en una elección innecesaria que pidieron los de la 4t, eso sí…

La presidenta Sheinbaum dijo ayer que “el INE se extralimitó en decir que había votos que no deberían incorporarse al resultado final, eso es labor del Tribunal Electoral, no del INE”. Para variar, está mintiendo. El Art. 41 apartado B de la Constitución señala que corresponde al INE los escrutinios y cómputos de los procesos electorales federales, así como la declaración de validez y el otorgamiento de constancias. Y para declararla, el INE ejerce su facultad constitucional de escrutinio y cómputo.

La presidenta también dijo: “ahora quieren revisar qué tantas cosas cuando no es su atribución, entonces sí, es un grupo de consejeros que no actúan buscando que se cumpla la voluntad del pueblo…” pues resulta que no es así (otra vez). Los consejeros ejercen las atribuciones que la Constitución les dicta. Y esto a partir de la reforma de la 4t. La presidenta remató: “tiene una posición política y que votan todo lo que viene de la 4t…”

NO es así. Las sesiones y las votaciones del Consejo General del INE son públicas. Es más, asiste un representante de la 4t. Quizá este no se entera de lo que sucede ahí o simplemente ha optado por decirle mentiras a la mandataria.

Autoritarios de manual. El banderazo para la reforma electoral ya se dio. La pantomima de la 4t de posar como demócratas ya no es necesaria.

Giro de la Perinola

La gran paradoja es que esa concentración de poder no está haciendo al país más eficiente ni en seguridad ni en crecimiento económico ni en justicia, etcétera.

Se ha aniquilado a la administración pública y al federalismo, sin lograr ni una sola mejora.

Dado que buscan ser autoritarios, ojalá hubiesen sido como los regímenes autoritarios de Singapur, China o Corea del Sur; pero aquí el centralismo no ha servido de nada salvo para enriquecer a una nueva camada de morenistas. Tal vez porque actúan como los neoliberales que consideran que la concentración solo jode todo. Sí, bajo la premisa económica de que los monopolios (y peor si son del gobierno) encarecen los resultados.

Aquí, de lo que siempre se trató es de cumplir, siguiendo el manual de los autoritarios, la petición de López Obrador. Cuidado: ‘lo que digas puede ser usado en tú contra’ dado que la revocación de mandato es en el 2027…