México.- Con la ceremonia de develación del billete de lotería en conmemoración del 40 aniversario de la creación de la Defensoría de la UNAM 1985-2025 arrancaron de manera formal las actividades por las cuatro décadas de la primera ombudsman universitaria en el mundo de habla hispana, germen del sistema no jurisdiccional de protección de los derechos humanos en México.

Guadalupe Barrena Nájera, titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios, Igualdad y Atención de la Violencia de Género, dijo que, frente a escenarios mundialmente desafiantes, de incertidumbre y crecimiento de posiciones que tienen en común la exclusión de otros que no comparten origen, religión, nacionalidad o creencias, el desafío para las y los universitarios se concreta en esperar e intervenir, en sostener una visión de un futuro posible, “en prepararnos para la acción y actuar”.

En el mundo de las ombudsman universitarias, mencionó, se habla de que estas oficinas constituyen la conciencia de la universidad. “Servimos a la comunidad para darnos la oportunidad de convivir entre todos según nuestras máximas aspiraciones, y de acuerdo con lo que establece la legislación universitaria”.

En la Biblioteca Lilia Margarita Guzmán y García de la Facultad de Arquitectura (FA), refirió que esencialmente la instancia a su cargo tiene una función de escucha y consejo a la comunidad que se acerca porque enfrenta dificultades en el transcurso de su vida en la Universidad, y se ejerce en el marco de una vocación ampliamente difundida en esta casa de estudios de dialogar, intercambiar puntos de vista y encontrar formas de construir hacia el futuro, juntas y juntos.

La Defensoría, recordó Barrena Nájera, fue fundada en 1985 por el entonces rector de la UNAM, Jorge Carpizo Mac Gregor. Hoy, “nuestro mandato es recibir las inquietudes de las y los universitarios respecto de hechos que les resultan injustos o arbitrarios”.

La violencia por razones de género también es una tarea central en las funciones de la Defensoría desde el año 2020, para que las personas que la han vivido tengan las herramientas para narrar su historia y solicitar la intervención de las autoridades en las mejores condiciones posibles, refirió.

Guillermo Garduño Aguilar, subdirector general Jurídico de la Lotería Nacional, dijo que “nos convoca un acto simbólico y profundamente significativo: la develación del billete conmemorativo del sorteo superior número 2846 emitido para celebrar el cuadragésimo aniversario de la Defensoría de los Derechos Universitarios de la UNAM”.

Un billete de la lotería no es sólo una imagen impresa o una oportunidad de ganar; es, calificó, una ventana a la historia, un reconocimiento público y una herramienta de memoria colectiva.

En representación de la directora general de la Lotería Nacional, Olivia Salomón Vibaldo, rememoró que esa Defensoría nació como un órgano independiente, primero en su tipo no sólo en México, sino en toda Iberoamérica.

Guillermo Garduño también recalcó el interés de Lotería Nacional por estar más cerca de la gente, reconociendo las luchas y logros de todos los sectores en todos los rincones del país. Este sorteo, con un premio mayor de 17 millones de pesos en dos series y una bolsa total de 51 millones de pesos (a celebrarse el viernes 30 de mayo a las 20 horas), no sólo ofrece esperanza a quienes participan, sino que visibiliza una historia de justicia, equidad y dignidad.

Mónica Cejudo Collera, directora de la FA, mencionó que los derechos humanos son importantes para los profesionales de la arquitectura porque no sólo construyen estructuras y espacios, sino que además “damos forma a entornos donde se desarrolla la vida humana”.

Son variados los puntos de encuentro entre la arquitectura, los derechos, la cultura y la política; el diseño universal y la arquitectura inclusiva buscan eliminar las barreras de acceso, movilidad y funcionalidad del entorno físico, para garantizar la integración plena de las personas con discapacidad.

En el plan de trabajo 2025-2029 de la entidad, “propuse una serie de acciones para promover y garantizar que se impulse la creación de líneas de investigación y formación con perspectiva de género para el diseño y construcción de espacios públicos y privados”.

De igual modo, que las actividades que se desarrollan partan de un concepto de salud integral, no sólo física, sino mental y emocional; el fomento entre el personal docente y el alumnado de relaciones sanas, respetuosas y constructivas, y la creación de espacios seguros e inclusivos para toda la comunidad. “En la consecución de estas acciones esperamos contar con la colaboración y acompañamiento de la Defensoría, en el ámbito de sus funciones y en el marco de su competencia”, finalizó.

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Foto Benjamín Chaires

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