Ante los continuos ataques del ejercito de Israel contra civiles en Gaza, autoridades de Palestina han denunciado que, desde el 2 de marzo, debido al bloqueo de ayuda humanitaria por parte de militares israelís, carca de 320 personas han muerto y 300 mujeres embarazadas han sufrido abortos espontáneos.

La oficina de prensa de las autoridades en Gaza publicó un comunicado en Telegram donde indicaron que, estos alarmantes números se han dado en sólo 80 días. Asimismo, señalaron que 242 personas han muerto por escasez de alimentos y medicamentos, entre ellas 26 pacientes con enfermedades renales.

Al referirse a los abortos accidentales, recalcaron que esto se da por la falta de nutrientes esenciales para los embarazos, así como la falta de atención médica. Por ejemplo, debido al fracaso de las campañas de donación de sangre, muchas mujeres con embarazos complicados no pueden someterse a cesárea.

Las autoridades palestinas expresaron su preocupación y condenaron las políticas genocidas de Israel, a través de las cuales han estado manejando sistemáticamente una campaña de hambruna, negligencia medica y robo de combustible, a través de 80 días consecutivos de bombardeos y asesinatos directos.

"Este es un crimen claro y completo que constituye un genocidio. Presagia una grave catástrofe humanitaria que amenaza la vida de más de 2,4 millones de palestinos en Gaza", denuncio el gobierno de Palestina, a la par de exigir la entrada de 500 camiones de ayuda y otros 50 de combustible de forma diaria.

Para finalizar, extendieron un llamado al Tribunal Penal Internacional (TPI) y las organizaciones de Derechos Humanos, con el fin de que asuman sus responsabilidades legales para comenzar a enjuiciar a los altos mandos militares de Benjamín Netanyahu por crímenes contra la humanidad y genocidio étnico.

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Foto: Reuters

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