• Puebla

Por denuncia de abuso sexual en la UPAEP, profesora de basquetbol presenta su renuncia

  • Municipios Puebla
Ana Rentería afirma que fue hostigada, además, asegura que se le difamó, restando autoridad y aislado laboralmente

Puebla, Pue.- El caso de abuso sexual que salió a la luz pública recientemente en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, sigue dando de qué hablar en dicha institución académica, al grado de que una profesora presentó su renuncia como irrevocable, ya que asegura, la UPAEP no brindó el acompañamiento institucional a la chica afectada.

Es así que Ana Rentería, quien era entrenadora del equipo selectivo femenil de preparatoria de baloncesto en la UPAEP, presentó su renuncia después del caso de presunto abuso sexual que habría cometido Miguel N., Jefe de Deportes de este colegio en contra de una menor de edad.

Es así que la profesora utilizó las redes sociales para exponer el caso y ofreció sus argumentos por los cuales, deja la UPAEP.

“Soy Ana Rentería. Desde el mes de julio del año pasado y hasta ahora he fungido como entrenadora del equipo selectivo femenil de preparatoria de baloncesto de la UPAEP y quiero hacer de conocimiento público que he presentado mi renuncia irrevocable y los motivos por los que tomé esta decisión en este momento”, inicia su misiva.

A continuación expone 10 puntos que ella considera primordiales en este caso:

1.- En días pasados circularon notas periodísticas denunciando ilícitos cometidos por el Jefe de Deportes de la UPAEP, en razón de ello la UPAEP emitió un comunicado en el que me enteré oficialmente de lo sucedido, quedé impactada de enterarme de esa forma y de que no se me haya comunicado nada de manera directa.

2.- Soy la primera entrenadora mujer de las seleccionadas de basquetbol de nivel preparatoria. Las alumnas integrantes del equipo son excelentes deportistas, como todo deportista de alto rendimiento que combina el deporte con el estudio, exigidas en todos sus aspectos. Al hacerme cargo de la preparación del equipo puse toda mi experiencia al servicio de ellas, acompañándolas en cada proceso personal que se les presentaba como parte de su formación deportiva. Tengo la firme convicción que niñas y adolescentes deben ser entrenadas por personas de su mismo género, hombres por hombres y mujeres por mujeres.

3.- Mi llegada a la UPAEP fue muy amable y cálida, sin embargo, pasadas unas semanas noté comportamientos atípicos con mis jugadoras resultado de las afectaciones que sufría particularmente una de ellas, en muchos momentos esa jugadora presentó molestias físicas que le impedían entrenar al tener dolores intensos, a tal grado de tenerla que canalizar al área de urgencias de la Institución, mi jugadora evidentemente afectada psicológicamente también sufrió ataques de ansiedad, sobre todo cuando se presentaban en los entrenamientos personal de coordinación y dirección deportiva de la institución. Estos hechos fueron de conocimiento general, tanto de las demás jugadoras como de los directivos de deportes quienes llegaban durante sus valoraciones. Al preguntar a mis superiores sobre cómo proceder ante estos incidentes, en vez de recibir orientación, la indicación fue que no me metiera y dejara que las autoridades institucionales atendieran los incidentes, ante la repetición de estos hechos y la gravedad y naturaleza de los mismos con el consentimiento de mi jugadora lo hice del conocimiento de sus padres. A partir de ahí se me hostigó y aisló laboralmente, sin embargo, como una profesionista con ética y responsabilidad, continué con el proyecto por el cual inicié en mi alma mater.

4.- En los pasados días cuando sin previo aviso mi jugadora se dejó de presentar a los entrenamientos, preocupada por su seguridad acudí a mi superior para informarle y una vez más pedir indicaciones, sin embargo, su respuesta fue que llamara directamente a la jugadora para saber el por qué no se había presentado ya que él no tenía información y la autoridad dentro de la cancha era yo no él. Nunca en mi experiencia de estudiante y deportista viví algo parecido a lo que ahora sucede.

5.- La UPAEP nunca consideró que todo lo sucedido afectaba de manera directa el desempeño del equipo que dirijo, nunca me ha considerado o se me ha informado nada de manera directa, en todo momento la institución me ocultó cualquier protocolo o decisión que hayan tomado cuando el equipo que dirijo era directamente afectado, puesto que para cualquier deportista la estabilidad emocional es fundamental y esta estabilidad se veía afectada al una de sus integrantes estar siendo vulnerada.

6.- Soy una mujer de familia y de deportistas. No vine a trabajar a mi alma mater la UPAEP por un puesto, sino para formar basquetbolistas de excelencia. Tanto mi esposo como yo hemos tenido el honor de representar a México en Campeonatos Internacionales y hemos sido seleccionados nacionales. Yo, formé parte del equipo de la UPAEP. Soy Águila. Fui una estudiante becada y foránea que entiende el contexto de vida de muchas de mis jugadoras.

7.- En todo momento y aún después de que se hicieron públicos los hechos, todos actúan como si no pasara nada dentro de la institución sabiendo la gravedad de lo ocurrido, nadie se ha ocupado de atender a las deportistas muchas de ellas menores de edad que temen por su propia seguridad y que no dicen nada por miedo, han invisibilizado lo ocurrido pretendiendo mostrar que no pasa nada y sí pasa.

8.- Desde el momento en que se hizo público lo ocurrido se intensificó el hostigamiento y acoso laboral que ya existía en mi contra, se me ha difamado, restando autoridad y aislado laboralmente.

9.- Nadie merece vivir, estudiar y trabajar con miedo a represalias ni que su vida entera esté condicionada. Para mí, mucho más importante que cualquier medalla o campeonato es formar personas de bien, utilizando el basquetbol como una herramienta para fomentar valores y lo que está sucediendo dentro de UPAEP, va totalmente en contra de mis principios, no existen condiciones para seguir laborando en esta institución.

10.- En la UPAEP hace años cuando fui parte del equipo representativo, eran tiempos distintos en los que aprendí a luchar por los valores e integridad que representaba. Es tiempo de que sus alumnos y exalumnos encaminemos a nuestra propia institución a retomar un camino del que se ha desviado. Nuestros hijos, los jóvenes, se merecen la excelencia que nosotros tuvimos, se merecen no solo educación de calidad en instalaciones de primera, también tienen derecho a ser tratados con dignidad, respeto y amor. La ética y responsabilidad se aprenden, si queremos mejores seres humanos, si queremos jóvenes con valores y principios prediquemos con el ejemplo en la trinchera que estemos, ya sea como padres, como profesores, como compañeros, dentro o fuera. No dejemos solos a nuestros jóvenes. Todos formamos parte de una comunidad, ocupémonos de mejorar la comunidad en la que vivimos, aún más en la que nos formamos.

Hasta el momento, la UPAEP no ha ofrecido una postura oficial en torno a la renuncia de la exprofesora, Ana Rentería, quien por cierto, en redes sociales ha recibido el apoyo de los internautas.

¿Quieres mantenerte a tanto de todas las noticias hoy en Puebla? ¡Explora más en nuestro portal ahora mismo!

Foto EsImagen

mala

Tags: 

municipios_interiores: 

Encuesta

¿Usted ha recibido apoyos del gobierno del estado en el último mes?