Cuando encendemos el motor del coche, no solo vemos las luces del tablero como parte del arranque: estas pueden iluminarnos sobre diversos problemas mecánicos, eléctricos o de seguridad que puedan afectar la conducción. Algunos de estos símbolos son simplemente recordatorios, pero otros indican fallas serias que requieren atención inmediata. Conocer qué significa cada símbolo puede ser clave para evitar accidentes y alargar la vida útil del vehículo.

Símbolos comunes en el tablero

El tablero de instrumentos de cualquier automóvil está lleno de iconos que varían según la marca y modelo, pero hay algunos que se repiten en casi todos los vehículos y tienen un significado universal:

1. Sistema de frenos: Las alertas relacionadas con los frenos son de suma importancia. Si se enciende una luz de advertencia, podría ser una señal de que las pastillas de freno están desgastadas y necesitan ser reemplazadas. También puede aparecer una luz que indica un fallo en el ABS (Sistema de frenos antibloqueo), lo cual es un tema serio, ya que puede comprometer la seguridad al frenar bruscamente.

2. Seguridad y estabilidad: Este conjunto de luces incluye indicadores como el que avisa sobre el mal funcionamiento del sistema de control de tracción (lo que podría aumentar el riesgo de derrapes). También suele iluminarse el icono del cinturón de seguridad, que recuerda al conductor y a los pasajeros abrocharse antes de poner en marcha el coche.

3. Sistema eléctrico y combustible: Si te aparece una luz que indica "falla electrónica", no es un buen presagio. Esta advertencia podría señalar un problema con el sistema eléctrico, que generalmente requiere la intervención de un profesional. También están las luces de "combustible bajo" y "filtro de aire sucio", las cuales advierten sobre situaciones más cotidianas, pero que no deben ser ignoradas.

¿Qué hacer cuando aparece un símbolo en el tablero?

Ante cualquier luz encendida, lo primero es no entrar en pánico. En muchos casos, la alerta es solo un aviso para que tomes acción antes de que la situación se agrave.

1. Consultar el manual del vehículo: Cada coche tiene un manual donde se especifica el significado de cada símbolo y las posibles soluciones que puedes aplicar. Si el símbolo se refiere a un problema menor, como el combustible bajo, no es necesario preocuparse mucho. Sin embargo, si es algo relacionado con los frenos o el sistema de refrigeración, hay que tomar medidas de inmediato.

2. Evaluar la urgencia: Si la luz sigue encendida o parpadea, especialmente en temas de seguridad (frenos, temperatura del motor), no dudes en acudir a un mecánico de confianza. Algunas fallas pueden ser simples de arreglar, pero otras podrían ponerte en una situación de peligro si no se atienden rápidamente.

3. Revisar el vehículo de inmediato: Si sabes que el problema es algo que puedes resolver de inmediato (como agregar combustible o ajustar el filtro de aire), no dudes en hacerlo. Pero si no estás seguro de la causa o si la luz persiste, lo mejor es acudir a un experto.

Recuerda que prevenir siempre es mejor que lamentar. Un pequeño aviso en el tablero puede ser la clave para evitar un gran gasto o, lo peor, un accidente en la carretera.

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foto cortesía 

xmh