Un trágico accidente ocurrió este sábado en la carretera de la región andina de Uyuni, al suroeste de Bolivia, donde la colisión entre dos autobuses dejó un saldo preliminar de al menos 37 personas fallecidas y alrededor de 30 heridas. La tragedia ocurrió en las primeras horas de la mañana, cerca de las 4:00 hora local, cuando un autobús que partió desde el departamento de Oruro con destino a Atocha chocó contra otro vehículo de pasajeros que viajaba de Uyuni. 

Según el comandante de la Policía Fronteriza de Uyuni, Wilson Flores, uno de los autobuses invadió el carril contrario, lo que habría provocado el impacto frontal. Aunque las autoridades aún están investigando las causas exactas del accidente, se anunció que se realizarán pruebas de alcoholemia a los conductores, quienes también resultaron heridos en el choque. Uno de los choferes se encuentra en terapia intensiva, mientras que el otro presenta lesiones menos graves.

El accidente ocurrió a solo 5 kilómetros de la ciudad de Uyuni, cuyo sistema hospitalario se encuentra desbordado debido a la cantidad de heridos que llegaron a las emergencias, lo que ha generado una situación de colapso en los centros de atención médica. A pesar de los esfuerzos de los servicios de emergencia, muchos heridos siguen siendo evaluados y se teme que la cifra de víctimas mortales pueda aumentar.

De acuerdo con informes locales, varios de los pasajeros viajaban hacia el Carnaval de Oruro, uno de los eventos más importantes y reconocidos a nivel mundial, declarado patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO. Este dato ha generado aún más conmoción entre la población, pues se trataba de personas que, como miles de otros bolivianos, se dirigían a disfrutar de una de las festividades más tradicionales de la región.

Este trágico accidente se suma a una serie de siniestros viales que han marcado el inicio de 2025 en Bolivia. En lo que va del año, se han registrado 16 accidentes de tránsito en diferentes carreteras del país, resultando en la muerte de al menos 119 personas y dejando a más de 90 heridas. En uno de los accidentes más graves, un camión volcó a finales de febrero, dejando 12 muertos y varios heridos en el sur del país, mientras que otro accidente a principios del mes cobró 28 vidas y más de 20 heridos en el suroeste boliviano.

Los accidentes en las carreteras bolivianas son un problema recurrente, con cifras alarmantes de muertes y lesiones. Se estima que cada año se registran alrededor de 1,400 decesos y 40,000 heridos, la mayoría de los cuales son atribuibles a fallas humanas que podrían prevenirse, según datos oficiales. Las autoridades continúan trabajando en la mejora de la infraestructura vial y en la implementación de medidas de seguridad, pero la falta de educación vial y la imprudencia al volante siguen siendo factores críticos que aumentan el riesgo en las carreteras del país.

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Foto cortesía 

xmh