Ante las amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, con las cuales pretende realizar deportaciones masivas, los estados de Sonora y Coahuila han activado un plan de acción para hacerle frente a la contingencia.

En Coahuila se han habilitado cuatro albergues en los municipios fronterizos de Acuña y Piedras Negras. En estas instalaciones se pretende darle estadía a los migrantes y facilitarles el regreso inmediato a sus estados, o países, de origen.

Asimismo, en la entidad se fortaleció la seguridad en la frontera y las carreteras que llevan a esta, para poder controlar el flujo migratorio y estar al tanto de que no se cometan crímenes como el trafico de personas o el robo de combustible.

Por su lado, en Sonora los albergues y comedores para migrantes se encuentran en estado de alerta, ya que recibirán una afluencia de personas que nunca se ha visto en la historia de la entidad. Por ello, Protección Civil ha ofrecido sus servicios para ayudarles.

El titular estatal de Protección Civil, Armando Castañeda Sánchez, destacó que el estado cuenta con unos 144 refugios temporales listos para atender a unas 400 personas cada uno. Aunque claro, esto dependerá de lo que vaya a ocurrir después del 20 de enero.

Si los números de inmigrantes llegan a superar lo calculado, el funcionario comentó que se implementarán protocolos creados específicamente para esta situación, como lo son la habilitación de mas albergues que cuenten con cocinas, regaderas y camas.

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Foto: Especial     

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