Con el fin de año a la vuelta, México ofrece una gran variedad de destinos playeros para todos los gustos, combinando paisajes espectaculares, actividades emocionantes y experiencias únicas para disfrutar en pareja, con amigos o en familia.

Desde el avistamiento de ballenas en Baja California hasta la serenidad de las costas de Yucatán, aquí te dejamos cinco opciones que no te puedes perder.

1. Los Cabos: El santuario de las ballenas y un paraíso natural

En la punta sur de la península de Baja California, Los Cabos se convierte en un destino ideal para quienes buscan disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión.

Durante los meses de invierno, especialmente en diciembre, las ballenas grises migran hacia las aguas del Pacífico, y qué mejor manera de presenciar este fenómeno que a bordo de un catamarán. Los tours de avistamiento, guiados por expertos locales, ofrecen una experiencia única.

Pero Los Cabos no es solo para los amantes de la fauna marina. También puedes explorar playas paradisíacas como Balandra, considerada una de las más bellas del país, y recorrer el Pueblo Mágico de Todos Santos, famoso por su ambiente bohemio.

Si eres de los que disfrutan de la aventura, no puedes perderte la expedición a la Reserva de la Biósfera Sierra La Laguna, un espacio lleno de cascadas y pozas naturales.

2. Puerto Vallarta: El encanto del Pacífico con actividades para todos

Si buscas un destino que combine montañas y mar, Puerto Vallarta es tu lugar. Este destino costero de Jalisco no solo te ofrece la posibilidad de relajarte en sus playas, sino también de vivir una aventura inolvidable.

La temporada de ballenas jorobadas es una de las atracciones más buscadas, y realizar un tour de esnórquel en los Arcos de Mismaloya es una de las mejores maneras de hacerlo.

Para los más exploradores, Puerto Vallarta esconde rincones únicos como la playa de Colomitos, considerada la más pequeña de México, ideal para quienes buscan disfrutar de un lugar tranquilo y apartado. Además, la ciudad ofrece una vibrante vida nocturna y una rica oferta gastronómica, lo que hace de este destino una excelente opción para despedir el año junto al mar.

3. Acapulco: Historia y aventura a orillas del Pacífico

Acapulco sigue siendo un destino clásico para las vacaciones de fin de año, y no es para menos. En esta ciudad, que alguna vez fue un puerto crucial para los galeones españoles, puedes disfrutar tanto de su historia como de su belleza natural.

Si eres amante de la aventura, el tour de kayak y senderismo en El Morro te llevará por uno de los puntos más emblemáticos de la ciudad. Además, no puedes dejar de explorar la Laguna Tres Palos, un refugio natural de flora y fauna.

Si te interesa la historia, el Fuerte de San Diego, construido en el siglo XVII, te permitirá conocer más sobre el pasado de Acapulco y su función como puerto de defensa contra los piratas. Para cerrar el día, un atardecer en La Quebrada es una parada obligada, una postal que captura la esencia de este destino icónico.

4. Puerto Escondido: La costa oaxaqueña en su máxima expresión

Si prefieres un destino más tranquilo y auténtico, Puerto Escondido, en Oaxaca, es el lugar perfecto para desconectar del bullicio.

Este destino no solo es famoso por sus playas ideales para el surf, sino también por sus actividades ecoturísticas. En diciembre, puedes ser parte de la liberación de tortugas en la Barra de Colotepec, un acto de conservación que conecta a los turistas con la naturaleza.

Las aguas bioluminiscentes de la laguna de Manialtepec ofrecen una experiencia única para aquellos que desean descubrir un fenómeno natural impresionante. Además, los miradores de Mazunte y el amanecer en Punta Cometa te brindarán la oportunidad de empezar el nuevo año rodeado de belleza natural y energía positiva.

5. Progreso: Playas tranquilas y ecoturismo en Yucatán

Por último, si buscas un destino relajado pero lleno de actividades ecoturísticas, Progreso, en Yucatán, es una excelente opción. A tan solo unos kilómetros de Mérida, este puerto es conocido por sus playas tranquilas y su oferta de ecoturismo.

Puedes explorar los cenotes de Santa Bárbara, nadar entre estalactitas o recorrer los manglares de San Crisanto, una experiencia que te conectará con la biodiversidad de la región.

Si prefieres algo más dinámico, la salinera de Xtampú, famosa por su laguna rosa, es un lugar fascinante para visitar. Además, recorrer el malecón a bordo de un bar móvil es una forma original de cerrar el año con tus seres queridos, disfrutando de la brisa marina y la tranquilidad del lugar.

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Foto cortesía