En su tradicional discurso “Urbi et Orbi” pronunciado desde la logia de la Basílica de San Pedro, el papa Francisco hizo un llamado a silenciar las armas y superar las divisiones. El mensaje marca el inicio del Jubileo del Año Santo 2025 dedicado a la esperanza y fue un resumen de los principales conflictos y sufrimientos que enfrentan diversas regiones del planeta.

El pontífice se refirió a la situación en Ucrania, Medio Oriente, Siria y Gaza, donde la crisis humanitaria es alarmante. Mencionó los desafíos que afectan a comunidades de África y naciones afectadas por conflictos armados.

Señaló con preocupación los efectos devastadores de las guerras y las crisis humanitarias. Hizo un llamado urgente a la liberación de los rehenes tomados por Hamás y resaltó el sufrimiento causado por el sarampión en la República Democrática del Congo. Además, recordó la tragedia de los niños que padecen hambre, de los ancianos en soledad y de aquellos que huyen de sus hogares debido a persecuciones o conflictos.

El mensaje también abordó la situación de los cristianos desplazados, como en Gaza y mencionó las esperanzas de los soldados ucranianos en medio de su segunda Navidad en guerra.

La apertura de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro es un llamado a la misericordia divina y a la reconciliación, y marca el inicio del Jubileo, un evento que se celebra cada 25 años en la tradición católica y que atrae a millones de peregrinos. 

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Foto: Especial

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