La final del torneo femenino de voleibol de playa en los Juegos Olímpicos, el pasado viernes, ofreció un momento inusual y conmovedor que quedará grabado en la memoria de todos los presentes, en especial de las participantes.

Y es que el enfrentamiento entre Brasil y Canadá no solo fue una batalla por la medalla de oro, sino también un escenario para una mágica canción aligerará el ambiente.

En un enfrentamiento cargado de tensión entre las jugadoras brasileñas Ana Patricia Silva Ramos y Eduarda Santos Lisboa y las canadienses Melissa Humana-Paredes y Brandie Wilkerson, la rivalidad en la cancha alcanzó un punto álgido. Los intercambios de palabras y gestos desafiantes fueron suficientes para que el árbitro interviniera y separara a las jugadoras, mientras que el público sentía cómo la tensión se apoderaba del ambiente.

En medio de esta atmósfera cargada, el DJ del evento decidió tomar cartas en el asunto. Con el objetivo de reducir la tensión, eligió reproducir "Imagine" de John Lennon, un clásico himno a la paz.

La elección resultó ser una jugada maestra: las jugadoras comenzaron a relajarse y algunas incluso sonrieron al ritmo de la emblemática canción. La transformación en el ánimo de las competidoras fue notable, con algunos espectadores uniéndose al canto de la canción y aplaudiendo la iniciativa musical.

Finalmente, la tranquilidad retornó al campo de juego y el partido se reanudó. Brasil logró imponerse en el encuentro con parciales de 26-24, 12-21 y 15-10, llevándose así la medalla de oro. No obstante, el equipo canadiense hizo historia al convertirse en el primer dúo canadiense en alcanzar un podio olímpico en voleibol de playa.

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