Como cada año, el Sahara, uno de los desiertos más grandes del mundo desprenderá parte de su arena afectando a gran parte del mundo y México incluido.

De acuerdo con el meteorólogo Matt Devitt, es una nube de polvo que está compuesto de micropartículas de arena que contienen una gran variedad de minerales que viajan miles de kilómetros, del norte de África hacia diversos países y continentes.

Aunque no hay una fecha oficial, se prevé que llegue a México entre julio y agosto. Primero llegará a Estados Unidos, en Florida, para luego extenderse al Caribe, Centroamerica y México.

En nuestro país, el polvo llegaría principalmente a Quintana Roo, Yucatán y Campeche.

De acuerdo con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, este fenómeno podría causar ataques de asma e irritación en los ojos, aunque sus efectos son mínimos.

No obstante, se recomienda evitar actividades al aire libre, usar mascarilla, lavar ojos y nariz constantemente y cerrar puertas y ventanas de los hogares.