Este sábado 22 de junio, China y Francia lanzaron un satélite con el objetivo de detectar explosiones de rayos gamma colosales, que podrían contener más información sobre el origen del universo.

La misión Space Variable Objects Monitor (SVOM) fue lanzada a las 15:00 horas (hora Beijing) desde la región de Xichang, en Sichuan.

El SVOM es un artefacto de 930 kilogramos cuyo diseño y construcción tardó más de 20 años. 

Fue enviado a una órbita de más de 600 km sobre la tierra, teniendo una vida útil de más de cinco años.

"Esperamos algunos descubrimientos importantes, como los primeros estallidos de rayos gamma que ocurrieron cuando el universo aún estaba en su infancia, lo que nos ayudará a estudiar la evolución cósmica", señaló Wei Jianyan, investigador principal chino del SVOM.

El objetivo del satélite es buscar la localización de estallidos de rayos gamma, el estudio de la energía oscura y señales electromagnéticas para conocer la evolución del universo.

En él están instalados cuatro instrumentos científicos de los cuales son desarrollados por China y dos por Francia, estos permitirán obtener una gran visión de campo y una observación de alta precisión.